Una bicicleta estática, regalo navideño para Iñaki Urdangarin
El Juzgado de Vigilancia Penitenciaria de Valladolid autoriza la entrada de una bicicleta estática en el módulo que ocupa Urdangarín, tras la queja formulada por el propio interno
Garita de vigilancia de la cárcel de Brieva / Alex García
Ávila
Iñaki Urdangarin podrá disponer de su propia bicicleta estática esta Navidad. Así lo ha autorizado el Juzgado de Vigilancia Penitenciaria de Valladolid, después de que la dirección el Centro Penitenciario de Brieva hubiera denegado el permiso para que pudiera tener su propia bicicleta.
Urdangarin interpuso una queja ya que las bicicletas de uso común que hay en el polideportivo del centro "le resultan demasiado pequeñas". Él puede utilizar esa instalación común cuando el resto de las internas no hacen uso de la misma, ya que es el único hombre en una cárcel de mujeres y no tiene contacto con ellas.
El auto del Juzgado de Vigilancia Penitenciaria dice que "la utilización de la bicicleta estática puede resultar beneficiosa para la salud tanto física como psíquica del mismo" y que "no constatando que se trate de un objeto de uso prohibido en el Centro, entendemos que debe estimarse la queja planteada por el interno y autorizarle el uso de una bicicleta estática, en este caso de su propiedad y por tanto adecuada a su constitución".
Y es que como Iñaki Urdangarin mide prácticamente dos metros de altura, "no existe en el centro penitenciario maquinaria deportiva adecuada para la realización de ejercicios aeróbicos".
El módulo en el que vive Urdangarin
El auto judicial describe el lugar en el que se encuentra Iñaki Urdangarin. Se trata de un módulo con una zona común "medianamente amplia", una celda, un aseo y un patio (dimensiones aproximadas de 20x7 metros).
"A diferencia de un módulo al uso de cualquier prisión española, carece de gimnasio pues aunque existe la dependencia (sumamente reducida), adolece de dotación (cuenta con una espaldera en mal estado)", según recoge el auto. El resto de las estancias del módulo, compuesto por varias celdas y zona de duchas comunes, está sin utilizar.
"Disponer de la bicicleta estática, cuya autorización se solicita, puede ser en este caso un útil instrumento para ocupar las largas horas de soledad y ayudar con ello al mantenimiento de la salud mental del penado", concluye el juez de vigilancia penitenciaria.
María Ángeles Hernández
Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid. Es redactora en SER Ávila desde 1994....
