Los estudiantes de bachiller, los más perjudicados por la huelga de la enseñanza concertada

Bilbao

Padres y madres de alumnos de la enseñanza concertada vasca, con los que ha hablado hoy la cadena SER en Euskadi se quejan de que sus hijos hayan perdido prácticamente una semana de clase, en especial los que tienen hijos en segundo de bachiller que tienen que hacer la selectividad a finales de este curso. "Es un trastorno para los chavales por que pierden cuatro dias seguidos de clase que tienen que recuperar más adelante y la verdad es que nos genera un gran problema", nos decía el padre de un alumno del colegio Escolapios de Bilbao. "Pienso que lo peor es para los más mayores" decía la abuela de otro niño más pequeño que se ha tenido que hacer cargo de él durante estos dias porque sus padres estan trabajando. Otros padres han optado por utilizar los servicios mínimos y han llevado a sus hijos al colegio, "si tuviera que dejarlos con alguien, al final tienes que reorganizarte todo" decía la madre de otro niño. 

El cuarto y último día de huelga en los centros de iniciativa social de la enseñanza concertada vasca se ha saldado hoy con un seguimiento similar al de los tres anteriores, de entre el 60 y el 65 % según las estimaciones de los sindicatos, aunque la patronal Kristau Eskola ha rebajado la incidencia hasta el 26 %.

Las movilizaciones se han trasladado hoy a Vitoria donde una multitudinaria manifestación ha partido a media mañana de la Plaza Bilbao para finalizar en la Virgen Blanca con una pancarta con la leyenda en euskera "Por un nuevo acuerdo, negociación real ya". En declaraciones a los medios de comunicación al inicio de la marcha, la representante de ELA Miren Zubizarreta ha felicitado a los trabajadores por su "persistencia" en las movilizaciones y por el "amplísimo" seguimiento en estas cuatro jornadas de huelga. Zubizarreta ha pedido a las patronales que hagan propuestas con contenidos reales que respondan a las reivindicaciones de los trabajadores" en lugar de las propuestas "escasas" que han planteado hasta la fecha.

La patronal Kristau Eskola ha criticado en cambio a los sindicatos por haber llevado la tensión a las aulas y los ha emplazado a "retomar las negociaciones cuanto antes para poder llegar a un consenso, desde la responsabilidad y con el esfuerzo y voluntad de todos, sin poner en peligro, ni la viabilidad del modelo concertado, ni la calidad del proyecto educativo".

Zubizarreta ha advertido además que las movilizaciones continuarán si las patronales no dan una "respuesta significativa" a las demandas de sus plantillas, que pasan por aliviar la carga de trabajo, recolocar a los trabajadores afectados por los posibles cierres de aulas y recuperar el poder adquisitivo perdido, entre otras cuestiones. Las movilizaciones que han realizado esta semana los trabajadores de la enseñanza concertada son continuación de las dos jornadas de huelga llevadas a cabo los pasados 9 y 10 de octubre y de las tres secundadas el curso pasado en el sector. Algunos sindicatos hablan ya de la posibilidad de ir a una huelga indefinida a principios del próximo año.

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Kristau Eskola, la patronal mayoritaria del sector, ha pedido al Gobierno Vasco más financiación para esta red, y ha recordado que los colegios concertados son un servicio público. El gobierno vasco sin embargo ha eludido toda responsabilidad en el conflicto. La consejera de educación Cristina Uriarte alega que el conflicto no se debe a "una cuestión únicamente de dinero, sino de condiciones laborales" y ya el primer día de la huelga pidió a las patronales de la enseñanza concertada y a los sindicatos "que se sienten a negociar en las mesas que les corresponden y saquen el conflicto de las aulas porque a los únicos que perjudica es a los alumnos".

La huelga afecta a 215 centros educativos de iniciativa social, que representan el 70 % de la enseñanza concertada vasca, en la que estudian unos 120.000 alumnos  prácticamente la mitad de todo el alumnado de la enseñanza vasca no universitaria.