La historia se repite

Oviedo

Derrota del Real Oviedo en el minuto 93. Y sí, otra vez con un gol encajado a balón parado y ya van nueve esta temporada. Sea cuestión de concentración o de responsabilidad de cada uno, pero dichas acciones están condenando a los azules que vuelven a perder un encuentro en el tiempo añadido al igual que ocurrió hace dos semanas frente al Rayo Majadahonda.

Escucha la rueda de prensa de Anquela.

Los carbayones tuvieron que afrontar los últimos diez minutos de partido con un jugador menos por la expulsión de Ramón Folch, que vio una segunda amarilla que previamente fue sacada a Christian Fernández. Además, los ovetenses reclamaron un claro penalti no pitado sobre Joselu cuando el choque estaba con empate a uno y antes, Ibrahima, que entró en la segunda mitad, puso las tablas en el marcador tras el tanto anotado por Luis Suárez en el primer tiempo.

Anquela mantuvo el mismo once que salió de inicio la jornada pasada frente a Osasuna, pero al igual que ante el conjunto navarro el técnico jienense tuvo que cambiar el sistema en la segunda parte para pasar a jugar con dos delanteros.

El Oviedo empezó el primer tiempo dominando, tanto en la posesión del balón como en cuanto a ocasiones de gol se refiere. En cinco minutos los azules ya lo habían intentado dos veces, primero la tuvo Joselu con una chilena que se fue alta tras un centro de Tejera, y después el propio centrocampista recibió un pase atrás de Berjón en la frontal del área y su lanzamiento fue rechazado por Becerra una vez que el balón salió rebotado tras pegar en un defensa del conjunto catalán. Fueron los únicos acercamientos de los carbayones durante la primera mitad que, aunque tenían el control, no fueron contundentes en ataque, ni tampoco en defensa porque la primera llegada del Nástic terminó en gol. Centro al segundo palo que llegó a Luis Suárez, controló con la derecha, recortó a Mossa y con la izquierda batió a Alfonso entre las piernas. A partir de ese momento siguió el mal del Oviedo en estas últimas jornadas con un equipo estéril a nivel ofensivo y con muchas dudas atrás. Incluso al conjunto catalán, que cada vez llegaba con relativo peligro, le anularon un gol por un ajustado fuera de juego de Manu Barreiro.

Únete al canal de WhatsApp de la SER

La segunda parte comenzó con un paradón de Alfonso cuando Manu Barrerio se plantó solo ante el guardameta y el esférico se paseó por la línea después de pegar en el palo. La tónica del encuentro era la misma y Anquela decidió realizar un doble cambio en el minuto 55 dando entrada a Ibrahima y Javi Muñoz por Diegui y Mossa. De esta forma el técnico pasó a jugar con dos hombres arriba y sería precisamente Ibrahima quién levantase el ánimo de sus compañeros una vez más y anotase el tanto de los azules en un balón parado. Falta botada por Berjón, peinó Forlín adelantándose a Becerra, la pelota golpeó en el larguero y el senegalés en boca de gol anotó su primer tanto con la elástica azul.

El partido se revolucionó en los últimos minutos y la moneda podía caer de cualquier lado. En primer lugar el Oviedo reclamó un claro penalti de Albentosa sobre Joselu que, en su intento de despejar el balón, le pegó una patada al delantero en la espalda. Prácticamente en la siguiente jugada el colegiado expulsó a Ramón Folch por doble amarilla, una tarjeta que anteriormente había sacado a Christian Fernández, pero según reconoció el propio centrocampista después del partido, Gorostegui Fernández corrigió su decisión sobre la marcha y finalmente dejó al Oviedo con un futbolista menos.

A pesar de la expulsión Anquela decidió ir a por los tres puntos e introdujo en el césped a Borja Sánchez, que debutaba con el primer equipo, retirando del campo a Joselu. Todo parecía que iba a terminar en empate hasta que en el minuto 93 un nuevo despiste de la zaga visitante dejó en bandeja el gol de la victoria a Albentosa, que tuvo tiempo hasta de controlar dentro del área sin ninguna oposición para batir así a Alfonso, que nada pudo hacer para evitar el dolor que provoca otra derrota en el último suspiro. Son 15 goles recibidos en once jornadas de Liga y nueve de ellos han sido a balón parado, unas jugadas que además de ser entrenadas también requieren su punto de concentración que está faltando en demasiados momentos durante los encuentros.

Oportunidad perdida de encadenar dos triunfos consecutivos para poder meterse en puestos de play off a tres semanas de que llegue el derbi frente al Sporting de Gijón. Primero, los hombres de Anquela tendrán que enfrentarse al Mallorca y Deportivo de la Coruña. El próximo partido será en el Carlos Tartiere frente al conjunto bermellón el domingo desde las 16:00 horas.