Una reforma necesaria
Las Palmas de Gran Canaria
Ayer se aprobó en el Congreso de los diputados la reforma del Estatuto de Automía de Canarias y ese no es un hito cualquiera. Es un reforma necesaria para avanzar y proteger el fuero de los canarios, El Ref, separarando este de la financiación autonómica, es decir de lo que nos toca por persona para mantener los servicios básicos. Sin mezclar una cosa con la otra.
Eso es lo más importante de esta reforma del estatuto de Canarias, de nuestra primera norma, porque garantiza la protección de nuetro fuero para que se pueda compesar nuestra lejanía e insularidad. Se trata ni más ni menos de sellar a fuego, que nosotros tenemos unas singularidades que como mínimo emanan de nuestra situación geográfica y de nuestra realidad física fragmentada. Y esto, para qué sirve al común se preguntarán ustedes, muy sencillo, garantiza que no se ponga en duda que aquí se necesitan compasaciones, para la electricidad, para la desalación del agua, para los transportes de personas y mercancías, entre otras cosas y para que nadie pueda jugar con que los canarios tenemos que recibir, que es la media de inversiones del estado por habitante.
Este nuevo estatuto supone también un avance en nuestro autogobierno, que desde su puesta de largo del año 82 o su posterior reforma del 96 no se tocaba. A partir de ahora el pte del gobierno de Canarias podrá convocar elecciones por una crisis política seria, se coloca a Canarias como primera autonomía en eliminar los aforamientos a los políticos, es decir que al mismo juzgado que todos nosotros. Y se avanza algo, no lo suficiente, en el reconocimiento de nuestras aguas. Para muchos se queda corto. Pero cierto es que el avance es importante.
Y para remate crucial, conlleva una reforma del sistema electoral, que implica mejorar la proporción en base a la población, todavía no lo suficiente, aunque sí permite una lista regional que hace algún tiempo se veía imposible.
Así se aprobó con el voto a favor de Pp, Psoe, CC y NC, la abstención de Ciudadanos y el voto en contra de Podemos. Con todo y si se terminan los flecos de los dos últimos trámites parlamentarios, Canarias gana. Nunca se puede ganar por 10 a 0, pero no se puede negar la clarísima mejora respecto a lo que hay.
