El acusado de agredir a su ex mujer con una abreostras asegura no recordar nada
El agresor basa su defensa en el consumo abusivo de alcohol a pesar de que los análisis de sangre lo descartan
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Beatriz Alvarez
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Palencia
El acusado de haber agredido a su ex mujer con una abre ostras el 4 de marzo de 2017, asestándola 5 puñaladas asegura no recordar nada de lo que ocurrió ese día y lo hace amparándose en un consumo abusivo de alcohol y pastillas antidepresivas aún a pesar de que los análisis de sangre que se le practicaron en el hospital el día de los hechos no reflejan consumo alguno de estas sustancias. Por su parte la víctima ha declarado que vivía asustada porque el hombre era muy posesivo y la amenazaba continuamente. Cabe recordar que el acusado ya fue condenado previamente por violencia de género y pasó 30 días en prisión por quebrantamiento de la orden de alejamiento que se le impuso en ese momento.
El ministerio Fiscal pide 9 años de cárcel por un delito de homicidio en grado de tentativa y otros 2 años por otro delito de amenazas, además de la prohibición de acercamiento e inhabilitación para el ejercicio de la patria potestad sobre los hijos, menores de edad, durante el tiempo de condena. Por su parte tanto la acusación particular como la Asociación Clara Campoamor elevan la petición a los 17 años y medio de prisión al considerar que se trata de un intento de asesinato.
El acusado, primero en declarar, ha mantenido en todo momento no recordar nada de lo ocurrido ese día, ha negado que amenazara a la víctima con antelación o que la acosara. Asegura que desde 10 días antes de los hechos había estado bebiendo sin parar y que no entiende por qué los análisis no reflejan ese consumo, ya que asegura estaba borracho perdido. La mujer ha ratificado lo denunciado en su día y ha negado que, como ha declarado el agresor, tuvieran nunca un abre ostras en su casa, ha asegurado que no la dejaba en paz y que su hijo mayor, que trató de ayudarla en el momento de los hechos, todavía tiene pesadillas. Ha descartado que estuviera bebido el día de los hechos ya que corrió y habló con total normalidad.
Por su parte los hombres que intercedieron para ayudar a la mujer han declarado que el acusado profirió exclamaciones como "La tengo que matar" o "No me peguéis que se lo que he hecho". Estas tres personas, al oír a la víctima pidiendo ayuda acudieron a socorrerla tras ser apuñalada en el interior del vehículo en el que estaban también sus hijos de 5 y 1 año y redujeron al agresor, que intentó autolesionarse, hasta que llegó la Policía Nacional.
El juicio ha quedado suspendido ante la incoparecencia de algunos testigos por lo que se retomará el próximo día 24 con las declaraciones y lectura de conclusiones.