Éxito rotundo en la séptima edición de la Triatlón Villa de Aranda

Aranda de Duero

La VII edición de la Triatlón Villa de Aranda fue un auténtico éxito. Un total de 160 participantes saltaron al agua para nadar un kilómetro y medio sobre el río Duero, recorrieron 40 kilómetros en bicileta y otros 10 ‘a pata’. Sin quejas y con aplausos más que merecidos para una organización que solo trata de mejorar. Todo ello bajo el apoyo continuo de decenas de personas que visualizaron la prueba y animaron a los triatletas en una mañana dominical difícil de olvidar. Y no es para menos.

Francisco Perales (Marlins) y Marina Muñoz (Tratlón Cuellar) fueron los ganadores y dominadores de su respectiva categoría. No dieron opción a sus rivales –a pesar de que el primero salió en segunda posición del agua- y mostraron un amplio nivel que evidencia la categoría de un triatlón que sigue creciendo. “Solo con decir que Rubén Peñuela que ganó el año pasado este año ha quedado tercero, dice mucho del nivel que estamos consiguiendo”, asegura Rodrigo Zanetti, del CD Triatlón Aranda

Un club contento y satisfecho “de cómo se llevó la prueba y con el subidón de que hayan salido las cosas bien”, además del apoyo del público. “La pasarela roja sobre el río y el puente principal estaban llenos de gente visualizando la prueba a nado y durante el recorrido a pie igual, dando muchos ánimos y con un apoyo que es fundamental porque también nos ayudan y nos echan una mano donde hace falta”, argumenta Zanetti.

Éxito rotundo para una prueba deportiva que hoy por hoy “es casi perfecta”. Y es que desde la organización reconocen que “hay que estudiar algunas cosillas que hemos visto”, pero a su vez aseguran que “hemos en contrado los circuitos, la carrera a pie ha sido un acierto, pero queremos darle un poco más de vistosidad y quizá podamos hacer una ligera modificación”. “Quedan pocos ajustes y hay que subir peldaños en calidad y organización, porque el fundamento ya lo hemos conseguido”, sentencian.