Ordenanzas contra macrogranjas. Los municipios legislan sobre el desecho de purines

Cuenca

Los Ayuntamientos pueden legislar a través de sus ordenanzas de Medio Ambiente las condiciones para la instalación en sus términos municipales de macrogranjas porcinas. Sotorribas, en la provincia de Cuenca, fue pionero y marcó un camino para otros consistorios. Nos lo ha contado en Hoy por Hoy Cuenca, Carmen Torralba, alcaldesa en 2005, cuando se aprobó la ordenanza.

El Ayuntamiento de Sotorribas aprobó en 2005 una ordenanza de Medio Ambiente en la que legislaba de forma específica sobre las explotaciones ganaderas. Establecía ya una distancia de dos kilómetros para instalar las granjas con respecto al casco urbano de cualquiera de sus núcleos de población.

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Además, detallaba las normas de tránsito y vertido de residuos ganaderos. Por ejemplo, prohíbe la circulación de cubas por el casco urbano, los purines deben verterse a una distancia mínima de un kilómetro del pueblo y solo en el periodo comprendido entre octubre y junio. De esta forma no está permitido su esparcimiento en los meses de verano, ni los fines de semana o festivos.

También se establecen las distancias de vertido con respecto a ríos, carreteras, caminos, montes o pozos de agua. Años después, varios Ayuntamientos de Cuenca tomaron como ejemplo esta ordenanza para ajustarla a sus términos municipales.

La ordenanza prohíbe también el desecho de purines en su término municipal procedente de otros pueblos y establece el proceso sancionador correspondiente.

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