Rosalía Arteaga: “A Rafael Correa, haber ostentado un cargo público no le da derecho a la impunidad”

Alicante

Su mandato fue breve, tan solo seis convulsos días en febrero de 1997 en los que asumió la presidencia de Ecuador, pero Rosalía Arteaga (Cuenca, Ecuador, 1956) ha continuado los siguientes 20 años en el activismo político, dedicada a causas sociales y medioambientales. Fue la primera mujer en acceder al cargo de presidenta de la república en el país americano. También fue vicepresidenta y ministra de Educación, Cultura y Deportes. Actualmente, es escritora y editorialista.

Preguntada por cuestiones relativas a la política de su país, rememora su fugaz presidencia. No duda que hubo un "golpe de Estado" y que el machismo fue la causa principal de su destitución, pero no la única. Reconoce, no obstante, que hubo otros "intereses políticos y económicos" que desencadenaron su pérdida de poder, sin especificar cuáles.

Su reacción a la reciente orden de detención contra el expresidente Correa, vinculado presuntamente al secuestro del exlegislador Fernando Balda, es contundente. Rosalía Arteaga celebra que en Ecuador "se está haciendo justicia" y acusa a Correa de cometer "delitos de lesa humanidad". Es más prudente al valorar la investigación al expresidente por supuesta financiación de las guerrillas FARC, aunque concluye que "haber estado en un cargo público no le da derecho a la impunidad, la ley debe imperar para todos".

En su faceta de activista medioambiental, acaba de participar en la Cumbre de Innovación Tecnológica y Economía Circular, junto a grandes líderes mundiales como el expresidente de los Estados Unidos, Barack Obama. La política insiste en el concepto del mundo glocal -local y al mismo tiempo global- como solución a una globalización homogeneizadora. El propósito es lograr un desarrollo más respetuoso con la naturaleza y los demás seres humanos.

Además, Arteaga ha publicado este año el poemario Rosa Carmín, con el que pretende "escribir una Historia en verso de mujer a mujer" para otorgar a las mujeres la importancia que merecen en la Historia de Latinoamérica. Con un propósito didáctico, la autora destaca que detrás de cada poema hace un análisis histórico con perspectiva de género. Preocupada por la violencia, "los totalitarismos" y la vulneración de derechos humanos, la escritora confía en que la mejora en la calidad de la educación "es la única forma de sacar adelante un país".

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Esta ha sido nuestra charla con ella en Hoy por Hoy aprovechando su visita a Alicante, donde presenta su libro: