El listón de la ética política

Valencia

Jorge Rodríguez, tal y como estaba previsto, abandona la Diputación de Valencia pero se queda como alcalde de Ontinyent aunque delega sus funciones en Rebeca Torró, su primera teniente de alcalde. El acta de concejal no la suelta. Hoy ha comparecido ante la prensa sin aceptar preguntas. Los trabajadores de Divalterra denuncian extorsiones, insultos, purgas por parte de Rodríguez y su equipo por advertir de las irregularidades en el uso de fondos públicos en esta empresa pública. Hubiera estado bien que Rodríguez contestara hoy a estas acusaciones y que la decisión de dar un paso atrás en todas las instituciones que preside hubiera sido la misma. Es decir, renunciar también a la alcaldía de su pueblo . El caso es que mientras se toma su tiempo para preparar su defensa, se van cerrando los círculos en torno a los que le siguen apoyando sin fisuras. Pero tal y como ha señalado él mismo, el listón de la ética política no está muy alto. Está donde debe estar. Aunque él, haya decidido de momento no actuar totalmente en consecuencia.