Los testigos describen el control absoluto de Villa sobre los ingresos del sindicato

Oviedo

 Un agente de la Guardia Civil ha confirmado este viernes durante el juicio de José Ángel Fernández Villa que las dietas que abonaba por asistencia al Comité Intercentros, eran abonadas en una cuenta a nombre del SOMA-UGT, que no tenía actividad sindical, en vez de al SOMA-FITAG-UGT, que era desde donde después se hacían los pagos a las personas que asistían a las reuniones. Los presidentes de Hunosa, Luis Tejuca y Teresa Mallada, confirmaron los pagos, aunque no dieron detalles de estos abonos.

Estos pagos por asistencias al Comité Intercentros están ya recogidos en el informe de la Guardia Civil, que esta mañana ha corroborado el agente adscrito a la Unidad Central Operativa (UCO) que ha declarado por videoconferencia. La peculiaridad que llama la atención es que el dinero era abonado por Hunosa en una cuenta distinta a la que después servía para pagar a las personas a quienes debían recibirlo. En esta tercera jornada, ha prestado declaración como testigo Carmen Blanco, quien durante 30 años fue la secretaria de Fernández Villa en el sindicato. Ella quien le llevaba la agenda, en la que figuraban desde citas con el dentista hasta reuniones sindicales. También fue quien cobró personalmente los cheques mediante los que Hunosa pagaba a Villa las dietas por asistencia al Consejo de Administración al que pertenecía. A preguntas del fiscal, explicó que los cobraba en efectivo y con discreción.

Todos ellos fueron cobrados durante años en pesetas, ya que a partir de dos mil dos estas dietas se abonaron mediante transferencia. Estas cantidades se fueron incrementando con los años desde las algo más de cien mil pesetas, según ha explicado la secretaria, hoy jubilada, hasta casi trescientas mil al final.