La denunciante asegura que Clemades Rodríguez tiró el puente por 'venganza'

Ponferrada

Persecución y venganza política. Así interpreta la exconcejala del PP de Carucedo, Ana Blanco, la decisión del exalcalde socialista Clemades Rodríguez, de derribar el puente que salvaba el arroyo frente a su casa. El juicio por presunta prevaricación de Rodríguez ha comenzado en el juzgado de lo Penal de Ponferrada y la denunciante sostiene que aquel derribo, ordenado en septiempre de 2013, se hizo sin ajustarse a la legalidad, puesto que, aunque existía una resolución de la Confederación Miño-Sil para demolerlo, cabía posibilidad de recurso. Blanco, a las puertas de los Juzgados, explicaba que había ánimo de 'persecución y venganza' contra ella y sus compañeros del Grupo Popular

De hecho, el mismo día del derribo, la propia Confederación envió un burofax al Ayuntamiento para paralizalo, según Blanco, un extremo que el exregidor niega, como también rechaza las acusaciones de persecución política. Clemades Rodríguez dice haberse limitado a cumplir la orden de Confederación. Aunque en la misma resolución de derribo del puente, el organismo de aguas informaba de que existía posibilidad de alegar, él interpretó que ese recurso podía tener lugar después del derribo.

Rodríguez recuerda que tanto el Ayuntamiento como la Junta Vecinal eran responsables subsidiarios, por lo que no tuvo otro remedio que demoler el puente y el tubo de alcantarillado contiguo. La acusación particular y el Fiscal piden para él 9 años de inhabilitación como cargo público, pero la denunciante reclama además la reposición del puente a su estado anterior o, en caso de que no sea posible, una indemnización de 32.000 euros, más otra de 30.000 euros por los daños psicológicos ocasionados.