Cumplir, y esperar
El Real Oviedo necesita ganar al Huesca y que además le acompañen tres resultados para entrar en playoff en esta última jornada.
Oviedo
Previsiblemente el Real Oviedo afrontará mañana el último partido de la temporada. Desde las 20:30 horas se medirá al Huesca en el Carlos Tartiere, una jornada que, excepto un partido, se celebrará en horario unificado. El conjunto azul es noveno y para poder disputar el playoff tiene que ganar a los oscenses y esperar a la siguiente carambola:
-El enfrentamiento entre Valladolid y Osasuna no termine en empate.
-El Cádiz pierda en Los Cármenes contra el Granada.
-El Numancia no gane a la Cultural Leonesa en Los Pajaritos.
Ante estas mínimas posibilidades, Anquela afirmó que lo intentarán hasta el final a pesar de las dificultades: "Hemos estado pregonando todo el año que había que trabajar hasta el último minuto del último partido, y a ver lo que pasa. Me gustaría haber llegado dependiendo de nosotros, hemos perdido todas las opciones y ahora toca esto. Vamos a competir”.
El entrenador ha ofrecido la convocatoria y, una vez conocidas las bajas de Saúl Berjón y Carlos Hernández por sanción, ha decidido incluir en la lista a Christian Fernández y McDonald Mariga. Habrá cambios obligados en el once, con la duda de si recuperará la defensa de cuatro, como bien ha ensayado estos días atrás, o si mantendrá el sistema de tres centrales y dos carrileros. En este último caso las únicas novedades serían las entradas de Christian en la zaga, y de Fabbrini en la banda izquierda.
Por decisión técnica se han quedado fuera de la citación Valentini, Pucko y Olmes. El colombiano, salvo giro inesperado, no podrá debutar con la elástica azul tras su incorporación en el mercado invernal. El pasado mes de febrero sufrió un esguince de tobillo y, aunque se ejercita con el equipo desde hace cuatro semanas, el jienense no le ha citado en ningún encuentro.
Los de Rubi ya son equipo de Primera División y únicamente se juegan quedar campeones. El club oscense llega envuelto en una polémica que desveló 'El Confidencial' respecto a su último partido ante el Nàstic donde se detectaron movimientos de apuestas inexplicables que hicieron que más de la mitad de las 59 casas de apuestas más importantes del mundo decidieran bloquear el encuentro. La victoria visitante recibió de repente tanto dinero que los grandes operadores temieron que el partido en cuestión estuviera amañado.
El Comité de Competición ha llevado a cabo un procedimiento disciplinario extraordinario, a petición de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), después de que ésta y La Liga recibieran un informe de la UEFA sobre "indicios claros de que se ha podido alterar el resultado".
El técnico catalán se desmarcó de este asunto en la rueda de prensa previa al choque: “Son cosas que no podemos controlar. Hemos competido lo mejor que hemos podido”.
Por su parte, Anquela no dudó de la inocencia de su exequipo y así también lo hizo saber públicamente: “Quien haya visto el partido los comentarios sobran. El Nàstic ha sido de los equipos que más partidos ha ganado fuera de casa, y el Huesca ha hecho lo que tenía que hacer, ascender a Primera División. Ha estado tranquilo durante la semana y el domingo compitió como lo hace en todos los partidos. Tuvo sus opciones y le anularon un gol. Yo no vi para nada desidia ni dejadez porque los futbolistas son unos profesionales como la copa de un pino. El club no permitiría eso bajo ningún concepto y el entrenador menos todavía”.
El conjunto blaugrana se presentará en el Tartiere con el único aliciente de terminar primero. Rubi admitió que la intesidad de los entrenamientos no es la misma y que la relajación forma parte de este momento una vez que han conseguido hacer historia: "El comienzo de semana fue enfocado a que el jugador no tenga que estar pensando mucho. Cuesta un poco más porque hay reuniones con futbolistas sobre su futuro y manejar todo esto antes de un partido no es nada fácil. Pero el sábado vamos a competir al máximo de nuestras posibilidades".
Con la expedición oscense no viajan Chimy Ávila y Melero, lesionados, ni tampoco el portero Remiro y el defensa Akapo, ambos sancionados. Además, Pulido, que sí estará en Oviedo, no se ha podido ejercitar durante la semana con normalidad por un proceso gripal.