Así vivió Moaña el día de Iago Aspas

Vigo

No era un lunes cualquiera en Moaña. En boca de todo el pueblo estaba un nombre: el de Iago Aspas. A pocas horas de que Julen Lopetegui diese la lista de convocados para el Mundial de Rusia, los halagos para Iago, su vecino de toda la vida, y la confianza de que su nombre estaría en la lista, eran una constante.

Pocos minutos después de la una del mediodía, con silencios que se hacían eternos entre cada nombre que salía de la boca de Lopetegui, el seleccionador rompió la calma tensa en la reunión de los miembros de la peña Moañesa Iago Aspas, en el puerto de Meira.

Unos nervios que fueron los justos y necesarios entre los que lo conocen de toda la vida, que lo han visto crecer y que sufrieron sus primeros regates cuando su hermano Jonathan lo llevaba con ellos a jugar. No les guiaba el corazón, que también. Había algo más objetivo que les daba la razón: los números.

Un día inolvidable para Iago Aspas, pero también para sus vecinos, que ven el nombre de Moaña asociado a aquel chico que soñaba con ser futbolista y que ahora estará en Rusia defendiendo a la selección.