La Comunidad de Regantes de El Carracillo considera que la tercera fase de la recarga no afectará al medio ambiente, ni al río, ni a los pinares
Enrique Herranz se ha mostrado sorprendido por el revuelo que se ha organizado en las últimas semanas y ha explicado que se ha presentado 600 alegaciones a favor del proyecto, "el sentir del 80% de la comarca".
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El presidente de la Comunidad de Regantes de El Carracillo, Enrique Herranz ha defendido el proyecto de la tercera fase de recarga después de que se cerrara el periodo de alegaciones y con el fin de explicar desde su punto de vista cuál es la realidad de El Carracillo e intentar tranquilizar a la población tras la polémica que se ha despertado en torno al proyecto. En primer lugar Herranz ha recordado que la comarca triplica el número de habitantes por kilómetro cuadrado y la media de trabajadores con respecto a Castilla y León en la industria agroalimentaria y en la agricultura. Además ha pedido respeto a la comarca y a la Comunidad de Regantes porque en los 25 años que llevan trabajando han logrado muchas cosas respetando el medio ambiente y los usos del agua. Herranz ha destacado la Comunidad de Regantes garantiza el uso sostenible del agua.
Tras estas afirmaciones, Herranz ha entrado a aclarar distintos aspectos que a su juicio se han tergiversado en las últimas semanas. Por un lado ha recordado que en la tercera fase se plantean varias actuaciones como la obra de recarga del acuífero, el traslado del agua mediante tuberías a los pueblos incluidos en la tercera fase y la modificación de la concesión del Río Cega. En este último aspecto ha insistido en que lo único que se pretende es “adaptar la realidad del río al Plan Hidrológico Nacional, respetar el caudal del río y garantizar el abastecimiento a los pueblos”. El presidente de la Comunidad de Regantes ha querido desmentir a aquellos que han dicho que “vamos a secar el río”. “No nos vamos a cargar el río, cogeremos un 15 o 20% del agua pero de esa cantidad vamos a regar y después revertiremos agua mediante los cauces y arroyos que desembocarán en el Pirón y después en el Cega”, ha apuntado haciendo referencia a que la mitad del agua la devolverán al río. “Vamos a coger agua a partir de 600 litros por segundo, lo que nos pertenezca que son unos 1000 litros por segundo”, ha puntuado.
“Si hay defensores del medio ambiente, la flora y la fauna, somos nosotros y queremos que haya una convivencia fluida entre el desarrollo de empresas, de los ciudadanos y de los pueblos” ha comentado Herranz que ha explicado que tanto la Junta de Castilla y León como los guardas de la Confederación Hidrográfica del Duero van a controlar la recarga. Ha hecho referencia también a la recarga en los pinares de Gomezserracín que afectaría a unas 800 o 1000 hectáreas. “Vamos a recoger en los meses de invierno y a extraer en los meses de verano, se van a poner unos niveles piezométricos para controlar la salida y la entrada de agua y no se van a inundar los pinares. En verano sacaremos lo que nos marque hasta el nivel idóneo”, ha detallado. Así mismo ha aclarado que no van a sacar agua si un año no se logra recargar ni tampoco si en dos años no se puede recargar y siempre sacarán menos de lo que se recargue. De este modo según el presidente de la Comunidad de Regantes van a contribuir a recuperar los humedales de la zona en los próximos años.
Enrique Herranz ha transmitido tranquilidad aludiendo a que el Estudio de Impacto Ambiental garantiza que no haya afección al medio ambiente, ni al río, ni a los pinares ni a los pueblos donde se llevarán las tuberías hidrantes. Considera que para realizar este EIA se han realizado muchísimos estudios y que será una de las obras de regadío que más se ha estudiado en España. “En el EIA quedará reflejado la problemática, las ventajas y los inconvenientes. Desde la Comunidad de Regantes queremos que se haga el estudio lo mejor posible para que nadie se pueda sentir afectado”.
Respecto al proyecto de concentración parcelaria de pinares no entiende el revuelo porque a su juicio lo que se pretende es mejorar la zona, con un ordenamientos, unos caminos anchos, con las obras de recarga y extracción y se puede hacer una explotación maderera lo que redundará en una ventaja, según ha trasladado a los medios de comunicación.
En cuanto a las alegaciones que se han presentado al EIA se ha mostrado sorprendido, en parte por el revuelo ya que creen que el proyecto es bueno para la comarca no solo económicamente sino también medioambientalmente. Además ha dado a conocer que se han presentado más de 600 alegaciones en favor de la tercera fase de recarga de empresas, asociaciones, particulares, trabajadores… “Las alegaciones a favor aglutinan el sentir de la gente en un 80% de la comarca”. Por último espera que estas alegaciones puedan estar resueltas en un mes y medio o dos meses para que se emita el informe favorable o desfavorable. Si el resultado es positivo se trasladará a la Confederación Hidrográfica del Duero para modificar la concesión y al ITACYL para que inicie los trámites para comenzar la construcción que calculan se podría llevar a cabo en 2 o 3 años. El proyecto tiene un coste final de 25 millones de euros de los cuales la Comunidad de Regantes a través de los socios hará frente al 29% del coste previsiblemente a través de un crédito bancario aunque se están estudiando las opciones.