Zorionak baskonistas!

Bilbao

"Tenemos un asunto pendiente con Vitoria". Estas palabras del director ejecutivo de la Euroliga han alimentado durante años la esperanza baskonista de acoger algún día la Final Four.

La designación, conocida ayer, es el reconocimiento a una ciudad que respira baloncesto, que pierde sus complejos en las canchas y, sobre todo, a la gestión de Querejeta. Aunque ayer dejara a los políticos vender el logro, por mucho apoyo institucional que tenga, sin el presidente la Final Four jamás habría recalado en una ciudad de 245.000 habitantes y 3.000 plazas hoteleras.

El talón de Aquiles de Vitoria es, sin embargo, la oportunidad para superar provincianismos y trabajar como Euskal Hiria. Toda Euskadi está a una hora en coche, como se ha visto en las finales de rugby. Por cierto, aprendamos de sus errores. La Autoridad vasca de la competencia va a investigar los precios de los hoteles por si hubo abusos. Y las instituciones se lamentan ahora, después, cuando llueve sobre mojado. Recuerden a Azkuna y la turista americana a la que devolvió 8 euros porque se sintió engañada por un bocadillo de jamón. "Tratemos bien al turista", abroncó entonces a los hosteleros, "que el boca a boca nos puede hacer polvo".