Sociedad | Actualidad

Preocupa más la homofobia o el racismo en el fútbol base que los radicales de los grandes clubes

El seguimiento de los grupos violentos en el fútbol profesional y sus estadios es motivo "ocupación" por parte de los Mossos d’Esquadra y de la Fiscalía, pero ya no es una "preocupación" como lo había sido años atrás

Getty Images

Barcelona

Ahora preocupa y "se fijará como una prioridad" la prevención del racismo, la homofobia o la xenofobia en el ámbito del deporte base, explicó a la Cadena SER el fiscal del Servicio de delitos de odio y discriminación, Miguel Ángel Aguilar: "Es importante fijar también como prioridad la prevención de los comportamientos discriminatorios en el deporte base y la administración tiene la obligación de estudiar todas las medidas necesarias para prevenir y sancionar este tipo de comportamientos" .

Se trata de miles de partidos en el fútbol base y amateur "con una presencia policial no tan profesionalizada" como las gradas de los grandes clubes de manera que en estos campos es más difícil prevenir la discriminación y el odio.

De modo que "también es un aspecto a trabajar en el ámbito educativo para sensibilizar en el respeto y la tolerancia" con apoyo de los padres y de campañas.

La implicación de los clubes, los Mossos y de la Fiscalía ha logrado erradicar los grupos violentos.Se ha procedido a gradas de animación sectorializadas, con controles biométricos, con pancartas registradas y controladas, y se han eliminado símbolos nazis como las calaveras Totenkopf o violentos como la imagen del perro pitbull en los caso de los Boixos Nois, y se ha hecho buena formación de la seguridad privada.

Había que prevenir, controlar y sancionar la formación de grupos ultras en las gradas que luego en la calle cometían delitos contra el que es diferente: "Las gradas de animación, en ocasiones, con cierta frecuencia se han utilizado por parte de grupos ultras para la captación, y reclutamiento de personas que rechazan al diferente, sobre todo grupos bien de la extrema derecha o de extrema Izquierda, que también ha habido casos, y por lo tanto son lugares donde se recluta y se fanatiza " .

Ahora se controla la entrada nominativamente o con pulsera en el campo del Barça y del Espanyol.

Joan Laporta fue víctima de extorsión y amenazas por parte de los ‘Casuals’, un grupo criminal habitual en la grada del Camp Nou, y a pesar del miedo tuvo el coraje de contribuir a su erradicación. Finalmente los Mossos y la Fiscalía han podido ir desmantelando estos grupos que tenían en las gradas más animadas su punto de reunión. Se debe considerar un éxito que en Cataluña hayan quedado desactivados grupos violentos que hacían de odio y la discriminación su razón de ser.

Y eso que no ha ayudado que en Europa la UEFA haya bajado la guardia a la hora de cerrar estadios, como ha denunciado reiteradamente Esteban Ibarra desde "Movimiento contra la Intolerancia".

En el combate contra el odio y la discriminación ha tenido mucho que ver las circunstancias agravantes que figuran en el artículo 22.4 del Código Penal de 1995 que penaliza: "Cometer el delito por motivos racistas, antisemitas u otra clase de discriminación referente a la ideología, religión o creencias de la víctima, la etnia, raza o nación a la que pertenezca, su sexo, orientación o identidad sexual, razones de género, la enfermedad que padezca o su discapacidad. "

Y también toda la normativa en cuanto al delito de odio desplegada por Naciones Unidas, la OSCE, el Consejo de Europa o la Unión Europea, y en España la ley de 2007 contra la violencia en el deporte para hacer un muy estricto control de la seguridad dentro de los estadios de fútbol.

En 2007 no había en la Fiscalía unidades especializadas y dos años más tarde se crean fiscalías para prevenir los delitos de odio y discriminación y las amenazas, daños o lesiones que se deriven.

 
  • Cadena SER

  •  
Programación
Cadena SER

Hoy por Hoy

Àngels Barceló

Comparte

Compartir desde el minuto: 00:00