Piden 9 años por agresión sexual al acusado de violar a una británica en El Arenal
La víctima no ha comparecido en el juicio por la violación en el callejón de un local de copas de El Arenal en mayo de 2015
Cadena Ser
Palma de Mallorca
La fiscalía mantiene una petición de nueve años de cárcel por un delito de agresión sexual para un hombre de 42 años acusado de violar en mayo de 2015 a una turista británica en la parte trasera del local de copas de El Arenal en el que trabajaba como camarero. El juicio se ha celebrado este miércoles en la Audiencia Provincial de Palma y ha quedado visto para sentencia. El acusado ha reconocido que mantuvo relaciones sexuales consentidas con la mujer, que finalmente no ha comparecido ante el tribunal a pesar de que había anunciado que declararía por videoconferencia.
El relato de la fiscalía sostiene que pasadas las tres de la madrugada, el acusado se acercó a una joven británica que estaba consumiendo copas en el local en el que trabajaba como ayudante de camarero. Le invitó a salir fuera con la excusa de fumar y una vez en el callejón comenzó a tocarle en su zona íntima. Según el fiscal, cuando la víctima trataba de huir el acusado le agarró de las muñecas, le bajó los pantalones y consumó el acto sexual. Unos hechos que el acusado ha negado durante la vista.
El hombre ha señalado que fue la mujer la que se bajó los pantalones. Un relato diferente al que realizó durante la fase de instrucción y que ha justificado en que no quería que su jefe le echase del trabajo porque necesitaba el dinero para enviárselo a su familia.
El acusado ha insistido en que la mujer había pasado por el bar en días anteriores y había flirteado con él. También ha manifestado que vio llorar a la chica después de los hechos porque sus amigas le habían increpado por su actuación ya que mantenía una relación sentimental en Reino Unido.
La víctima, que reside allí, no ha comparecido ante el tribunal a pesar de que había solicitado hacerlo por videoconferencia. Una incomparecencia que para el abogado defensor del acusado deja abiertas múltiples incógnitas sobre lo que pasó y la credibilidad del relato de la víctima.
