Batacazo en Los Pajaritos
El Real Oviedo se complica sus opciones de jugar el playoff después de perder 3-0 ante el Numancia. Los azules pagaron cara su falta de contundencia atrás y se mostraron con muy pocos recursos en ataque.
![](https://cadenaser.com/resizer/v2/EINBXO6ZQVISTP7SD34VS5LINE.jpg?auth=20f99614532b61c9dc6503faf236efe7206c605777166a5af82095dd96ee35a1&quality=70&width=650&height=365&smart=true)
Higinio intenta un remate ante la presión de Héctor Verdés. / La Liga
![Higinio intenta un remate ante la presión de Héctor Verdés.](https://cadenaser.com/resizer/v2/EINBXO6ZQVISTP7SD34VS5LINE.jpg?auth=20f99614532b61c9dc6503faf236efe7206c605777166a5af82095dd96ee35a1)
Oviedo
Dicen que el hombre es el único animal que tropieza dos veces en la misma piedra. Y esto se puede aplicar perfectamente al Real Oviedo tras lo visto en Los Pajaritos. Por segunda semana consecutiva, los azules fueron superados claramente por su rival y, la falta de contundencia, sumado a los errores defensivos, fueron aspectos determinantes ante un Numancia que no perdonó cada uno de los regalos que recibió por parte de la zaga carbayona. Los de Anquela, que tenían en su mano la posibilidad de regresar al playoff, no habían encadenado dos derrotas consecutivas hasta la fecha.
El técnico jienense realizó tres cambios en su once. Entró Héctor Verdés por Forlín en el centro de la defensa, pero las variaciones relevantes llegaron en las bandas con las titularidades de Diegui y Mossa, quedando en el banquillo Cotugno y Fabbrini. Aún así, el sistema no fue modificado y se mantuvo el 4-2-3-1 con Berjón, Aarón y Mossa por detrás de Toché.
Rueda de prensa de Anquela tras el partido contra el Numancia en Los Pajaritos
04:29
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
La primera parte empezó con los azules bien plantados sobre el terreno de juego y realizando unos 30 minutos más que aceptables. Berjón y Toché probaron fortuna, el ovetense con un disparo lejano de falta y el murciano después de rematar un saque de esquina que fue rechazado por la defensa. Los sorianos, que se acercaban al área visitante a través de las bandas, crearon el mayor peligro con un cabezazo de Pere Milla que encontró en Alfonso una respuesta espectacular, dejando así una de las paradas de la jornada. Pero apenas un minuto después llegó el primer gol del encuentro. La defensa azul, más adelantada de lo habitual, dejó mucho espacio a sus espaldas y eso lo aprovechó Pablo Valcarce para ceder el balón atrás y que Guillermo rematase a placer. Y al igual que ocurrió la jornada pasada, sin tiempo para reaccionar, el rival golpeó rápidamente de nuevo y cuatro minutos después, Valcarce, solo de marca, con un cabezazo, envió al fondo de la red un saque de esquina botado por Íñigo Pérez. Otro error considerable, pero no sería el último porque la mañana fue aciaga para la zaga carbayona. El tercer tanto, que ya llegó en el segundo tiempo, fue un fallo colectivo. El Numancia volvió a hacer daño a balón parado, en este caso tras una falta colgada al área, la contundencia brilló por su ausencia y el conjunto soriano tuvo hasta tres opciones en las inmediaciones de la portería, si bien en las dos primeras los azules lograron evitar el gol, no pudieron hacerlo con la tercera y Valcarce, uno de los hombres del partido, fusiló a Alfonso para matar el encuentro. Desde ese momento (minuto 53) el choque quedó visto para sentencia. Solo Linares, con un remate de cabeza a falta de trece minutos para el final, puso a prueba a Aitor Fernández, pero el guardameta estuvo rápido y pudo despejar el peligro sin mayores problemas. Incluso el resultado pudo ser más abultado, pero Higinio mandó su testarazo al palo cuando ya se cantaba el cuarto en la grada. El Oviedo recibió un severo correctivo y, aunque las matemáticas dicen lo contrario, las sensaciones no mienten. El nivel futbolístico y la competitividad se mantuvieron durante media hora en Los Pajaritos ante un equipo que tuvo las ideas muy claras y que en su estadio no suele perdonar como así se ha visto. Con este resultado, los de Anquela tienen perdido el golaveraje particular con los de Arrasate, al igual que con otros rivales directos como por ejemplo el Zaragoza, Granada, Valladolid o Tenerife.
Mientras los fantasmas del pasado sobrevuelan la capital del Principado, los carbayones todavía están a tiempo de conseguir el objetivo aunque es cierto que cada vez tienen menos margen de error. Quedan cinco encuentros que se tienen que afrontar como auténticas finales. Tras esta derrota, no descienden ningún puesto en la clasificación, son séptimos, se quedan a tres puntos del playoff, y la próxima jornada se enfrentarán el domingo al Lorca en el Carlos Tartiere desde las 16:00 horas con la obligación de sacar los tres puntos adelante.