El Numancia mantiene su idilio con Los Pajaritos

Soria

Demasiado agónico fue el final del partido para el Numancia, en un choque en el que los rojillos perdonaron en exceso, con muchas ocasiones claras de gol desperdiciadas, sobre todo en la segunda parte, para acabar llegando a los minutos finales con sufrimiento ante un Córdoba que buscó el empate. Sin embargo, los de Arrasate supieron aguantar los envites andaluces para salvar la victoria y mantener el suelo del play-off.

Como hace dos semanas, ante el Tenerife, al Numancia le costó coger el ritmo del partido en el primer periodo. Mejor plantado, con más posesión y las ideas más claras, el Córdoba llevaba la iniciativa, buscando la espalda de los centrales sorianos con la velocidad de Narvaez y Jovanovic por las bandas. Un par de centros laterales de Mateu eran las únicas bazas locales en los primeros quince minutos, mientras que Reyes, en el segundo palo, cruzó en exceso su remate tras un centro desde el costado derecho andaluz. Guillermo tuvo la primera ocasión para los locales, pero su cabezazo se marchó rozando el poste de Kieszek tras una dejada de Pablo Valcarce, también de cabeza. El verdiblanco Narváez remató fuera, muy forzado, en el segundo en un balón colgado de falta desde la derecha. Y del posible 0-1 a casi el 1-0, ya que en el rápido saque de puerta de Aitor, y tras una veloz carrera, el ilerdense Pere Milla se plantó solo ante el portero polaco del Córdoba, pero su remate se marchaba lamiendo la base del poste. Espabilaba el Numancia, que sumaba llegadas y que por fin acertó, en un saque de falta lateral de Íñigo Pérez que peinó Milla de cabeza y que Aythami desvió a su portería. Se adelantaban los locales, con una ventaja efímera, ya que Jovanovic aprovechó la indecisión de Aitor y Saúl en la frontal del área para meter la pierna e igualar la contienda. No se amilanó el conjunto de Arrasate, que buscó el segundo, y tras sendos intentos de Pablo Valcarce y Pere Milla, llegó el tanto, de bella factura. Un gran pase de Íñigo Pérez por encima de la defensa en la frontal del área, gran control de Marc Mateu, que gana la línea de fondo superando a Kieszek, y pase de la muerte que empuja Guillermo casi sobre la línea. Recuperaba la ventaja el Numancia, acreedor a ello por el mayor número de ocasiones, antes del descanso.

Fría comenzó la segunda parte, con imprecisiones y muchas interrupciones en el juego. Marc Mateu y Pablo Valcarce no lograron conectar el remate en el área visitante y Dani Calvo despejó un peligroso centro de Loureiro en el área local. Con la iniciativa, más combinativo e incisivo el Numancia, faltaba claridad y remate en los metros finales. El Córdoba se encomendaba a la veteranía y calidad de Reyes y Edu Ramos en la medular, sin apenas participación efectiva de sus extremos. Precisamente en una jugada por banda, Mateu puso un gran centro al segundo palo, donde Pablo Valcarce cabeceó picando abajo, a la base del palo, obligando a Kieszek a realizar una gran parada para despejar a córner. Dos jugadas a balón parado botadas por Reyes propiciaron al Córdoba sus mejores ocasiones, pero ni Alfaro ni Aythami encontraron portería. Tampoco Guillermo, en la portería contraria, tras una buena dejada de Mateu que el delantero remató de primeras desde el punto de penalti. Milla robó el balón en la frontal e intentó superar a Kieszek con una vaselina, pero el portero polaco adivinó la intención del ‘12’ rojillo. El Numancia empezaba a perdonar en exceso con un marcador demasiado apretado ante un Córdoba que no se rendía. Prueba de ello, el mano a mano que se fabricó Sergi Guardiola, aprovechando un error de Dani Calvo, pero su remate lo tocó con la bota Aitor (al estilo Casillas) para desviar el balón al poste. Los últimos minutos fueron de color Cordobés, apretando en busca del empate, con el Numancia queriendo evitar dar pasos atrás, pero obligado a ello ante la presión andaluza. Supo salvarla el cuadro de Arrasate para sumar otra victoria en casa y mantener vivas las opciones de promoción.