El único descabalgado
La Columna de Carlos Arcaya | El único descabalgado | 20/03/2018
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Alicante
Puede, o al menos hay quien espera, que entremos en una semana decisiva para que se materialice el relevo al frente de la alcaldía de Alicante.
Lo que está claro es que el cambio es una especie de inevitable estación tránsito que moviliza a todos los partidos, pero sin perder de vista de las elecciones municipales en mayo de 2019.
Es el verdadero objetivo y, a las mismas, hay que llegar en las mejores condiciones.
Por ello, el PP anuncia una moción de censura que ponga de manifiesto que tienen un proyecto para Alicante, a la que no se va a sumar Ciudadanos, que siguen en la cresta de la ola según las encuestas. Compromís quiere que se remanse la situación para volver a hablar de sus proyectos de ciudad. Guanyar también reclamará buena parte del éxito de lo que se inaugure antes de que concluya el mandato. Y el PSPV quiere cerrar la etapa Echávarri cuanto antes para que el ruido no distorsione las opciones de Ximo Puig.
Y de esta lógica, el único que queda descabalgado es el actual alcalde.