Agua suficiente para regar
Los regantes del Alto Duero y el Riaza tendrán una campaña tranquila gracias a las abundantes precipitaciones
Aranda de Duero
La Confederación Hidrográfica del Duero garantiza una campaña tranquila para los regantes del Alto Duero y de la zona del Riaza. Las abundantes precipitaciones de estas últimas semanas han reconducido la situación de los embalses, que se encontraban bajo mínimos tras una prolongada sequía, hasta el punto de que el pantano de Linares, que abastece de agua a unas 7.000 hectáreas de terrenos de regadío, supera ya el 85% de su capacidad.
Aún así, se ha acordado no rebasar un cupo máximo de 6.000 metros cúbicos por hectárea como medida de prudencia, a pesar de que a finales de septiembre se prevé que este embalse pueda albergar todavía 18 hectómetros cúbicos, de los 47 que tiene actualmente.
José Antonio Ruiz, Jefe de Área de Explotación de la CHD, dice que más bien el problema podría venir en esta ocasión de un posible deshielo rápido que no permitiera absorber la nieve que hay acumulada en la cabecera, aunque a corto plazo no es previsible que ocurra.
Las previsiones no son tan generosas para la cuenca del Alto Duero, aunque el pantano de la Cuerda del Pozo tiene un volumen de agua embalsada ya del 60% de su capacidad y todavía hay mucha nieve en la cabecera. En este caso, dice José Antonio Ruiz que está garantizada una campaña de riego sin restricciones, con unas dotaciones de referencia de 5.000 metros cúbicos por hectárea.
Para esta vertiente no hay peligro de desbordamientos, ni siquiera a corto plazo, dado el alto margen de maniobra que tiene el embalse de cara al deshielo.