Duelo por Forges y por la libertad de expresión. A propósito de Fariña

A Coruña

Ha fallecido Antonio Fraguas, Forges, tiñendo de luto a la libertad de expresión, la crítica inteligente sin concesiones aderezada por el buen humor. Nuestra sonrisa ha quedado helada en un tiempo en que se está llevando al extremo nuestra capacidad de asombro, en el que una capa espesa de intolerancia y aire rancio parece apropiarse del ambiente como no pasaba en décadas en este país. Una jueza ha decretado el secuestro cautelar de Fariña, el libro de nuestro compañero, el periodista coruñés Nacho Carretero, sobre el narcotráfico en Galicia y su conexión con el poder. Responde a la denuncia del exalcalde de O Grove, José Alfredo Bea Gondar, por supuesta vulneración de su derecho al honor. El libro, que va por su décima edición y preparaba su traducción al gallego y una serie de televisión, cita a Bea Gondar dos veces como imputado por narcotráfico. Lo fue, y condenado hasta que el Tribunal Supremo le absolvió porque invalidó el testimonio de un arrepentido. Sabemos más sobre Bea Gondar gracias a esa decisión de decretar el secuestro de un libro valiente. Las ideas, la información, la libertad de expresión no se pueden secuestrar. Los libros arden mal, decía Manuel Rivas las ideas son volátiles y se transmiten por todos los resquicios que deja el poder. Recordamos a Forges para terminar con una viñeta de un policía que multaba a un ciudadano. "¿Vaya, vaya, pensando, verdad?" Como telón de fondo una señal de prohibición que dice: "Prohibido pensar".

Sigue el rodaje de la serie sobre Fariña.