Amenaza que no es poco
La crisis catalana está sirviendo para que la derecha más rancia se atreva a decir sin complejos aquello que ha pensado siempre pero no se atrevía a verbalizar últimamente
Amenaza que no es poco. 07.02.17
01:25
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PALMA
Por si todavía no han tenido oportunidad de escucharlo, les recuerdo lo que pasó ayer en el Parlament. El exvicepresidente del Govern y actual diputado del Partido Popular, Antoni Gómez se dirige a la consellera de cultura, Fanny Tur:
.-“Señora consellera, en España no hay presos políticos ni se encarcela las personas por sus ideas y la prueba evidente es que usted está hoy aquí y no está en otro sitio”
Fanny Tur le responde:
.-“Disculpe, no he entendido dónde me quería usted ver: ¿en la prisión, en una cuneta...dónde me ha dicho que me quería ver? Perdone, es que no le he entendido. Mire, le explicaré una cosa: usted ha obviado una cosa que se llama presunción de inocencia”.
La crisis catalana está sirviendo para que la derecha más rancia se atreva a decir sin complejos aquello que ha pensado siempre pero no se atrevía a verbalizar últimamente. Incluyendo la amenaza directa, que las sutilezas no cotizan en las urnas.
Ahí tienen al vicesecretario de comunicación del PP, Pablo Casado, advirtiéndole a Puigdemont de que puede acabar como Companys o recordándole al presidente del Parlament catalán, Roger Torrent, que tiene dos hijos.
Y aquí está Antoni Gómez, que tras ejercer de devoto Sancho de su Quijote Bauzá, le toca ahora gallear en el Parlament para mostrarnos que su partido es más español que Ciudadanos.
El último CIS dice que suben las derechas y bajan las izquierdas. Amenazar no debería dar votos.