El asesino de Pioz no se inmuta al ver las macabras fotografías que envió a su amigo en Brasil

Guadalajara

El autor confeso de los crímenes de Pioz, Patrick Nogueira, ha estado por cuarta vez desde que llegara a España en los juzgados de Guadalajara. En esta ocasión declaraba a petición propia y también a petición de la acusación.

Desde la primera declaración el 21 de octubre, se han ido descubriendo nuevas pruebas, seguramente las más importantes las conversaciones a través del wassap con su amigo Marvin Henriques detenido en Brasil. Sobre estos nuevos aspectos de la investigación se le ha preguntado en esta ocasión en el Juzgado número 1 de Guadalajara.

El letrado de la acusación de la familia Campos, Alberto Martín atendía a los medios de comunicación al término del interrogatorio. No ha podido desvelar los detalles ni el contenido concreto de la declaración por petición expresa del juez que lleva el caso.

 Lo que si ha señalado el abogado es que tras la declaración él "está convencido de la absoluta responsabilidad del acusado". A Patrick le han enseñado todo el material enviado desde Brasil, principalmente los mensajes de wassap del teléfono del amigo y las fotografías que se hizo con los cuerpos descuartizados, y la actitud de Patrick, dice Alberto Martín, ha sido de absoluta frialdad.

Era la segunda ocasión que Patrick declaraba por los hechos después del testimonio inicial dos días después de llegar a España. Las otras dos comparecencias fueron para que presenciara el volcado de datos de su teléfono móvil y para el examen psiquiátrico forense.

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Al igual que en las ocasiones anteriores Patrick llegaba en el furgón de la Guardia Civil que ingresaba directamente al garaje del edificio de los juzgados. En la calle dos personas han gritado "asesino" y "a la silla elécrica". Llegaba a las 11 menos cuarto de la mañana y salía tres horas y media después.