Tiempos de sobresaltos
Tardaremos mucho tiempo en sobreponernos al susto y al disgusto que nos hemos llevado por la llegada a la Presidencia de los Estados Unidos de Donald Trump
Punto de Vista de Carlos Gómez Gil | Tiempos de sobresaltos | 15/11/2016
01:46
Compartir
El código iframe se ha copiado en el portapapeles
Alicante
Tardaremos mucho tiempo en sobreponernos al susto y al disgusto que nos hemos llevado por la llegada a la Presidencia de los Estados Unidos de Donald Trump. Este año 2016, que tantos sustos nos ha dado, parece querer terminar de la misma forma, y sin duda estamos a las puertas de cambios importantes a escala mundial de la mano del que es, por mérito propio, un esperpento presidencial.
Es cierto que Estados Unidos es un país complejo y contradictorio, capaz de tener las mejores universidades de todo el mundo y al mismo tiempo de promover decisiones catastróficas, pero nunca pensamos que podrían hacer presidente de esa nación a una persona misógina, xenófoba, hortera, defraudadora de impuestos, cuyo nivel cultural es tan bajo como zafio, que no se cansa en amenazar a los más débiles y que presume de que incumplirá compromisos internacionales tan importantes como el acuerdo mundial contra el cambio climático.
De las pocas cosas que en estos momentos tenemos claras es que aquellos países que han construido sociedades más justas, cultas e igualitarias, capaces de compartir una moral común a través de valores éticos colectivos son sociedades más avanzadas, prósperas, con mayor cohesión social, que experimentan mayores niveles de desarrollo económico y de bienestar, al tiempo que viven menores niveles de violencia y de desempleo. Justo lo contrario de lo que vive Estados Unidos y de lo que ha prometido el presidente más grosero y maleducado de toda su historia.
Me temo que entramos en tiempos llenos de sobresaltos.