‘El ministro Dastis y Gibraltar’
El hasta hace pocos días embajador dijo en su toma de posesión el viernes que sus prioridades iban a seguir siendo las mismas que las de su antecesor y padrino,
Firma Luís Romero, 'El ministro Dastis y Gibraltar'
02:34
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Algeciras
Después del comentario del viernes pasado de mi colega de columna, Pepe Torres, me dije a mí mismo que nunca más volvería a hablar de Gibraltar en este espacio, porque resultaría imposible leer algo mejor que eso. Pero, pese a ser consciente de que no lo voy a hacer mejor, me atrevo a reincidir. La cabra tira al monte.
En realidad de quien quiero comentar algo es del nuevo titular de Asuntos Exteriores del Gobierno de Rajoy, Alfonso Dastis. Quizás la gran sorpresa del Ejecutivo. El hasta ahora embajador representante permanente de España ante la Unión Europea, la mayor y más potente representación diplomática que España tiene en el extranjero, con un centenar de consejeros a sus órdenes, entre diplomáticos y técnicos de todos los ministerios; digo que el hasta hace pocos días embajador dijo en su toma de posesión el viernes que sus prioridades iban a seguir siendo las mismas que las de su antecesor y padrino, ya que fue Margallo quien lo nombró hace cinco años para el puesto que dejó el pasado jueves.
Margallo, que ni en su despedida pudo olvidarse de Gibraltar, le recordó a su sucesor que, abro comillas: “la oportunidad que el Brexit nos ofrece para recuperar la soberanía española en Gibraltar no se puede jugar partido a partido, ese partido se juega en marzo”, cierro comillas. Si eso no es meter presión…
Aunque el nuevo ministro, que es un técnico y no un político, se comprometió a mantener la agenda de su antecesor, todos en esta comarca (y él es de Jerez, a solo cien kilómetros de la Bahía) esperamos que afronte esta cuestión con algo más de mesura y un pelín menos de incontinencia verbal. Sería demasiado pedir, no hay que ser ingenuo, que fuera a girar 180 grados en lo que se refiere a Gibraltar, teniendo en cuenta además que procede de la misma Escuela en que algunos intentos por cambiar el discurso que allí se explica sobre esta cuestión se han saldado con el más absoluto fracaso.
De todas formas, esperemos que, aunque las fechas apremian, en su nuevo equipo podamos vislumbrar algún cambio en las formas, tan importantes en este asunto, ya que en los últimos tiempos éstas no se han cuidado especialmente desde el Ministerio. Aunque sí y mucho desde alguna representación española en el exterior que habitualmente interviene en los asuntos de Gibraltar. Insisto en lo que ya comenté hace unas semanas. El discurso ante la IV Comisión del representante permanente de España en las Naciones Unidas, es de los que deben releerse.
Es inminente que, además, con la llegada del nuevo Gobierno y del nuevo titular de Exteriores, se desbloqueen los nombramientos de casi medio centenar de embajadores pendientes de destino. Esto, aunque no se lo crean, puede afectar también a la comarca. Pero eso se lo contaré otro día.