A las puertas

Bilbao

Ocurriera lo que ocurriera en la cancha, iba a ser un día histórico. La selección española de baloncesto en silla de ruedas disputaba por primera vez la final de unos Juegos Paralímpicos. El rival, Estados Unidos. El objetivo, el oro.

Lo dejaba claro el bilbaíno Asier García, capitán del combinado español, en la previa: "Vamos a ir a por el oro". Y lo demostraron. Comenzó el encuentro con una intensa defensa, tanto es así que al descanso el luminoso reflejaba un exiguo 20-23 favorable a los estadounidenses.

Sin embargo, los de Artacho lucharon hasta el final y solo en el último cuarto el poderío norteamericano decantó la balanza. A partir de ahí, el seleccionador español repartió los minutos restantes para que todos los jugadores pudiesen vivir desde dentro la final. El resultado final, 52 a 68. España logró una plata que es histórica para este deporte.

En cuanto a Asier García, que había cuajado brillantes partidos tanto en cuartos de final ante Alemania como en semifinales ante Gran Bretaña, no tuvo su noche. Fuertemente vigilado por los rivales, solo pudo anotar 5 puntos. Sin embargo, capturó 10 rebotes y dio 16 asistencias.