Roca Rey abandona al Hospital Río Carrión con destino a Sevilla
La cogida sufrida este jueves no le ha provocado graves secuelas
Palencia
El torero peruano Andrés Roca Rey ha abandonado ya el Hospital Río Carrión de Palencia y se puede decir que se ha ido por su propio pie tras la cogida sufrida este jueves en el coso de Campos Góticos, percance que le provocó una fuerte conmoción. El torero ha partido con destino a Sevilla donde completará su recuperación. Se puede decir por lo tanto que la cogida no ha tenido graves consecuencias para el diestro.
Las pruebas médicas descartan fracturas en la cabeza o las cervicales, si bien el diestro deberá permanecer en reposo absoluto durante varios días. Lo que sí ha sufrido es una pequeña fractura en la parte izquierda del pómulo, que, según les ha advertido un cirujano maxilofacial de este centro hospitalario palentino, que, sin embargo, no necesita cirugía e irá soldando poco a poco por sí solo.
Roca Rey resultó cogido por el tercer toro de la corrida de la ganadería del Charro de Llen, que le echó mano al iniciar una tanda al natural, lanzándolo por aires, pasándoselo de pitón a pitón y, una vez en el suelo, volvió a hacer por él para propinarle golpes por todas las partes del cuerpo.
El peruano quedó inerte y boca arriba en el albero y fue trasladado a toda prisa a le enfermería donde los doctores pudieron apreciar que, pese a no llevar ninguna cornada, el torero presentaba una fuerte conmoción que le hizo desorientarse y no sabes siquiera donde se encontraba en ese momento, lo que hizo que le derivasen a un centro hospitalario para un estudio en profundidad.