El Área de Seguridad de Madrid tendrá que rehacer el Plan de Gobernanza
El PSOE rechaza cualquier proyecto de Convivencia en Lavapiés que no cuente con la aprobación previa del pleno municipal
Madrid
El equipo de Manuela Carmena tendrá que rehacer y empezar prácticamente de cero su controvertido “Plan de Gobernanza Comunitaria de la Seguridad y la Convivencia para el barrio de Embajadores”.
Ni las explicaciones del delegado de Seguridad, Javier Barbero, negando que el documento de trabajo incluya la figura de los jurados vecinales alternativos al sistema judicial, ni sus aclaraciones sobre el hecho de que se trata de un programa piloto, que “no está definido ni escrito”, han tranquilizado a la oposición. Más bien al contrario, porque el férreo ataque del Partido Popular, PSOE y Ciudadanos, volverá a reeditarse en el pleno municipal del próximo miércoles, día 27.
El grupo de Aguirre también llegó a decir que los “gestores de barrio” propuestos por la consultora externa contratada para redactar el plan eran como los “comisarios políticos de toda la vida”, además de denunciar el tufo “bolivariano e incluso soviético” de la iniciativa. La idea es que cada zona cuente con “una persona que conoce a fondo el barrio y sea capaz de ordenar y canalizar todos los problemas que puedan surgir”.
El PSOE, que ya avisó diciendo que el proyecto “está mal contado o mal planteado”, ha registrado una proposición para “rechazar” cualquier Programa de Seguridad y Convivencia, como el que se plantea para Lavapiés, “que no cuente con la aprobación previa del Pleno municipal”. El plan, además, ya fue paralizado por la oposición durante el pleno de la Junta Municipal de Centro del pasado 14 de julio donde Ahora Madrid perdió la votación.
El concejal socialista Ramón Silva le recuerda a Ahora Madrid que, al no disponer de una mayoría suficiente, están obligados a pactar con ellos. “En asuntos tan sensibles como la seguridad, desde luego nosotros esperamos y confiamos para aprender la lección de que ellos no tienen mayoría absoluta y por lo tanto no pueden gobernar como si la tuvieran. El PSOE decidió apoyar la investidura de Manuela Carmena, pero a partir de ahí tenemos que ponernos de acuerdo en las cuestiones concretas”, advierte Silva.
El segundo punto de esa iniciativa, el PSOE también propone para su votación el apoyo para la puesta en marcha de la denominada "policía comunitaria". Un apoyo tal y como recoge el Plan Director de la Policía Municipal de Madrid “buscando previamente los acuerdos y consensos con los sindicatos y asociaciones profesionales, que garanticen la implicación de los policías en el desarrollo de este nuevo modelo”.
La segunda proposición tiene que ver con la aprobación de un plan de trabajo para la Mesa de Convivencia y Seguridad de Lavapiés, y la elaboración de un Plan Integral participado que “pueda servir como experiencia piloto en la ciudad”. Esto significa, en la práctica, que el Área de Seguridad tendrá que rehacer el proyecto.
“Creemos que la única forma de hacer esto y de que funcione realmente es hacerlo a través del diálogo mediante la participación, con lo cual entendemos que el proyecto tiene que ser reformulado. Es más, creemos que es mejor empezar de cero y ponernos a trabajar conjuntamente, sobre todo para evitar polémicas que a la gente no le interesa realmente”, precisa el también edil socialista José Manuel Dávila.
Con toda la oposición enfrente, singularmente el PSOE, cuyo apoyo es imprescindible, el Área que dirige Javier Barbero, tendrá que ir preparando un nuevo documento de trabajo y explicarse mejor si quiere que el proyecto, similar al que ya se aplica en otras ciudades del mundo, pueda ver la luz algún día.
Policía comunitaria
El proyecto forma parte de un plan piloto para poner en marcha un sistema basado en un modelo de policía comunitaria que actualmente es el más aceptado a nivel internacional, con recomendaciones de organismos como la ONU o la OSCE, según explicó en su día el Ayuntamiento. “El sistema ya ha demostrado su eficacia en diferentes experiencias llevadas a cabo en Alemania, Holanda, Inglaterra o Estados Unidos”.
“Con este Plan, el gobierno de la ciudad pretende contribuir a que las políticas públicas que desarrolla, también aquellas en materia de seguridad, contribuyan a potenciar la implicación ciudadana y la gobernanza local, para situar a Madrid en el lugar que le corresponde, a la vanguardia de una democracia urbana plena y una cultura ciudadana inclusiva y corresponsable”.
La gobernanza, término que empezó a acuñarse en los años noventa, se refiere a una manera de gobernar cuyo objetivo es lograr un desarrollo económico, social e institucional duradero con un equilibrio entre el Estado, la sociedad civil y el mercado económico.
El modelo de “policía comunitario” que se propone en el Plan Director de la Policía Municipal parte de una mayor profesionalización del agente de policía municipal, abordándose la seguridad del barrio desde enfoques integrales, procurando llegar y proteger a aquellas personas y grupos más vulnerables y en riesgo, y contribuyendo a su incorporación a la comunidad y al estado de derecho.