El intrusismo en la Restauración pone en peligro el arte
La restauración de la obra de San Miguel en Peñaranda vuelve a desatar la polémica de los aficionados frente a los profesionales de esta profesión
Salamanca
Cada cierto tiempo salen a la luz restauraciones que convierten obras de arte en piezas que nada tienen que ver con las originales ya que se encarga el trabajo a aficionados.
La restaurado, Isabel Pantaleón, asegura que en la provincia de Salamanca se cometen muchos “delitos” de este tipo. Considera que la solución debería pasr por aumentar el control, exigir permisos de las personas que vayan a llevar a cabo el trabajo, así se garantiza que lo realicen personas tituladas.
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Entrevista a Ia restauradora Isabel Pantaleón
En algunos casos, si el aficionado sólo pinta encima se puede corregir el error pero hay numerosos casos, nos comenta Pantaleón, que lijan la obra y los daños son irreparables.
Lo primordial es que el restaurador tenga claro que lo principal es repsetar el original para que las generaciones futuras puedan disfrutar de las obras de arte de siglos pasados. Si se modifican se pierde el valor de la obra.
Isabel Pantaleón ha explicado el proceso que se debe seguir, se empieza haciendo un estudio, un informe de la obra en sí, le sigue una documentación fotográfica e histórica. Posteriormente se lleva a cabo un análisis clínico para ver los materiales y a partir de ahí se decide cómo llevar a cabo la restauración. Se trata de una labor costosa y meticulosa.
