Nigeria resuena en los muros de A Quintana
La cantante Nneka convirtió ayer el escenario de las fiestas del Apóstol en un chorro de voz único lleno de melodías y reivindicaciones.
![](https://cadenaser.com/resizer/v2/VPAE4TR4IZLYZHTC7AVSEAK7MA.jpg?auth=5eb82e8c55ebc41510b27b4255e1bd3cfde422053fe708299724d1129e4db9df&quality=70&width=650&height=487&smart=true)
La cantante nigeriana, acompañada de su acústica, repasó algunos de sus temas más conocidos pero se centró, sobre todo, en la promoción de su nuevo trabajo. / Carolina Neira Feáns
![La cantante nigeriana, acompañada de su acústica, repasó algunos de sus temas más conocidos pero se centró, sobre todo, en la promoción de su nuevo trabajo.](https://cadenaser.com/resizer/v2/VPAE4TR4IZLYZHTC7AVSEAK7MA.jpg?auth=5eb82e8c55ebc41510b27b4255e1bd3cfde422053fe708299724d1129e4db9df)
Santiago de Compostela
Las fiestas del Apóstol han buscado ritmos más allá del océano. Y tan en serio se lo han tomado que han traído a una de las mayores exponentes de la música reggae y soul del momento. De origen nigeriano y corazón de compromiso, Nneka llegó ayer con su chorro de voz, que fue capaz de tejer melodías entre los muros de una Quintana que, con la iluminación, parecía cobrar vida y movimiento al son de las cuerdas acústicas de la cantante.
El primer acorde tuvo sello gallego, el de Wöyza, una sopresa que la nigeriana había anunciado por la mañana, pero de la que no se sabía la identidad. La artista de Moaña, conocida por sus trabajos de hip hop y R&B, fue la encargada de telonear a Nneka cuando todavía no había anochecido.
Desde el primer momento, las intepretaciones de Nneka fueron aplaudidas por un público muy entregado, que reconocía la calidad del concierto del que estaba disfrutando. Con un arranque marcado por canciones más reggae, Nneka se fue metiendo a los asistentes en el bolsillo, para después rociarles con canciones más potentes, como una versión de su conocida Heartbeat.
Nneka se deslizaba por el escenario con su ropa negra como una sombra y su pañuelo como una protección de los focos. Y destacaba entre una banda que hacía sonar sus canciones con una limpieza brutal. Su voz, protagonista indiscutible de sus composiciones, fue repasando canciones de toda su trayectoria, como una íntima intepretación de Do You Love Me Now, en la que sentada y abraza a su guitarra consiguió crear magia bajo un cielo compostelano que parecía querer romper a llover.
![Nneka, rompiendo la ocsuridad de la noche con más fuerza que cualquier foco.](https://cadenaser.com/resizer/v2/QDEMCUHAXBJWXI32MIIJP7S7DQ.jpg?auth=48b826dedca069ac85d6ecab203e011d4b40a76b1cb0803d5262acb9cfa51261&quality=70&width=650&height=487&smart=true)
Nneka, rompiendo la ocsuridad de la noche con más fuerza que cualquier foco. / Carolina Neira Feáns
![Nneka, rompiendo la ocsuridad de la noche con más fuerza que cualquier foco.](https://cadenaser.com/resizer/v2/QDEMCUHAXBJWXI32MIIJP7S7DQ.jpg?auth=48b826dedca069ac85d6ecab203e011d4b40a76b1cb0803d5262acb9cfa51261)
Nneka, rompiendo la ocsuridad de la noche con más fuerza que cualquier foco. / Carolina Neira Feáns
Hubo más momentos que hicieron vibrar las gargantas de los que alzaban la mirada hacia la nigeriana, como cuando tocó My love, my love o cuando, puño en alto, reivindicó su condición de mujer y animó a todas las que pisábamos el suelo a levantar las manos y unirnos a su rebeldía.
Un concierto que supo a corto y en el que puede que faltaran canciones muy conocidas de la artista, pero que no dejó indiferente a ninguna de las personas que, fuera de pie, fuera sentadas, se acercaron hasta la plaza da Quintana para disfrutar de un trozo de África.