Mascletàs y metáforas electorales
Lo que verdaderamente se parece a una campaña electoral -incluido el día de las votaciones y las jornadas posteriores- es una mascletà
La Columna de Carlos Arcaya | Mascletàs y metáforas electorales | 23/06/2016
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Alicante
En esta radio, decían ayer Iñigo Errejón y García Margallo que Alicante y la Comunitat Valenciana son una metáfora de lo que puede suceder en España. Es decir, ambos reconocían que Unidos Podemos y el PP se disputan la victoria electoral en nuestra autonomía y esperan que ocurra lo mismo en el resto del país, mandando al limbo a socialistas y Ciudadanos.
Ya que estamos con los símiles y siguiendo en el lugar en el que se produjeron esas declaraciones: lo que verdaderamente se parece a una campaña electoral -incluido el día de las votaciones y las jornadas posteriores- es una mascletà.
No sólo es una cuestión de decibelios. Son espectáculos multisensoriales, organizados y si quieren un tanto exacerbados, en los que la parte aérea se ve venir -a distancia-; que siempre se espera un ritmo elevado y estructurado; y en dónde con la magnitud del terremoto final, la potencia surge inesperadamente del subsuelo y golpea en el pecho.
Además, en las mascletàs se desprecia a quien se queda corto. El olor -en este caso a pólvora- también es importante.
Hoy estará en Luceros, el socialista Pedro Sánchez. A ver qué metáfora utiliza para definir lo suyo.