La Universidad de la Experiencia: el trastorno obsesivo compulsivo de seguir aprendiendo

Palencia

Parece que el curso académico está llegando a su fin en todos los ciclos formativos. En el caso del Programa Interuniversitario de la Experiencia que se imparte en el Campus de la Yutera y en la sede de Guardo, los alumnos han decidido celebrar este fin de curso de una manera especial: haciendo gala de su buen humor y su talento interpretativo. El grupo de Teatro de la Universidad de la Experiencia estrenaba la semana pasada la obra “Toc-Toc”, una conocida comedia de Laurent Baffie.

El título de la obra, “Toc”, no es más que el acrónimo del “Trastorno Obsesivo Compulsivo”, una de las cinco enfermedades psiquiátricas más comunes. Este trastorno se caracteriza por pensamientos recurrentes que producen temor, aprensión y conductas obsesivas destinadas a reducir la ansiedad asociada.

La divertida comedia interpretada por los “alumos de la experiencia” se desarrolla en la sala de espera de la consulta de un psiquitra, donde varios pacientes con este trastorno interactúan en clave de humor haciendo gala de sus obsesiones: contar compulsivamente, evitar el contacto físico con otras personas, lavarse las manos cada pocos minutos, revisar el bolso una y otra vez, o repetir dos veces la misma frase… Un divertidísimo colofón de un curso académico que esta tarde bajará su telón para comenzar a disfrutar de las vacaciones estivales.

Como profesor del mismo debo reconocer que, en ocasiones, tengo la impresión de que los alumnos padecen un extraño trastorno obsesivo con este programa formativo: la gran mayoría repite año tras año sin importarles el esfuerzo que requiere o la similitud de sus contenidos. Cuando uno “escarba” lo que hay debajo de esta compulsión recurrente, aparecen también interesantes obsesiones que no puedo por menos que mencionar por su valía: el constante interés de los alumnos por el conocimiento, su afán por compartir sus experiencias y vivencias en torno a cada una de las disciplinas, su infinita curiosidad por los detalles, el respeto mutuo que cada cuál muestra con el compañero, el buen humor y la chanza oportunista, o su compromiso constante con esta institución académica a través de las actividades de Extensión Universitaria.

Muchas gracias a los alumnos del Programa Interuniversitario de la Experiencia, gracias por haber compartido con nosotros este curso pasado; y gracias por habernos permitido culminarlo con la mejor de nuestras sonrisas. Vuestro interés y tesón, nos devuelven cada día la ilusión por nuestro trabajo, por seguir practicando este “extraño trastorno obsesivo compulsivo de seguir enseñando”.

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