El diputado del PP que pedía prisión para dos periodistas retira la demanda
David González Medina anuncia mediante un comunicado que pone fin a la vía judicial y que su objetivo no era "meter a ningún periodista en la cárcel" pero sí buscar que "los responsables de la publicación reconocieran que se han equivocado"
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Gijón
Se acabó el litigio judicial entre un diputado del PP asturiano y dos periodistas del diario EL COMERCIO a los que pedía penas de prisión por encima de los tres años y medio tras haber publicado una información verificada y que destapaba el pasado del conservador. En 2004 fue condenado por tráfico de drogas y en 2011 por consumo de estupefacientes.
A través de un comunicado de cinco párrafos David González Medina ha anunciado que ha tomado la decisión de poner fin "al procedimiento judicial iniciado hace año y medio para defender mi honor y el de mi familia frente a una serie de informaciones publicadas contra mi persona".
Medina explica que ha tenido que elegir "entre lo conveniente y lo justo" y pone en cuestión la labor de los profesionales asegurando que lo publicado "retorcía la verdad hasta el punto de convertirse en un ataque hacia mí sin precedentes en la ciudad (como reconocieron muchos profesionales), con el único propósito de desprestigiarme, por razones e intereses que, desde mi punto de vista, están muy alejados de la buena práctica de la noble labor periodística".
Límites
El diputado conservador sostiene que la demanda fue presentada porque "bajo el pretexto de informar sobre la vida privada de un joven que aspiraba a una responsabilidad política, sigo creyendo a día de hoy que aquella publicación traspasó los límites éticos y legales". A ello suma las sensaciones vividas. "Durante aquellos días aguanté ataques, burlas y comentarios de toda índole, causando un dolor a mi persona y a mi familia que serán difíciles de olvidar".
El popular desgrana que su deseo no era "meter a ningún periodista en la cárcel por mucho daño que me haya hecho y tampoco deseo inhabilitar a nadie de su profesión". Añade que "nunca tuve la intención de vulnerar el derecho a la libertad de prensa, que para mí es fundamental e imprescindible en una democracia. Tan fundamental como el derecho al honor y a la intimidad de los ciudadanos" y descarga toda responsabilidad en su defensa. "Forma parte de las fórmulas legales empleadas por mi abogado para construir mi defensa, algo para lo que dispuso de plena autonomía".
Entonces ¿que objetivo se perseguía? "Buscaba que los responsables de esa publicación reconocieran que se han equivocado y que los límites legales y morales también son necesarios en el periodismo. Con la retirada de la misma, aun con el convencimiento de que me asiste la razón, lo que busco es no abundar en el dolor que el diario El Comercio le ha causado y le sigue causando a mi familia", insiste.
Decisión individual
La petición de cárcel corrio como la pólvora este viernes. Tanto que fueron infinidad de profesionales los que apoyaron a los dos compañeros y tacharon la actitud del político. La propia presidenta del PP asturiano tuvo que salir al paso este sábado y desligarse de la cuestión. Mercedes Fernández, principal valedora de David González Medina, sostuvo que se trataba de una decisión personal. Una postura que concuerda con la expresada horas más tarde en el comunicado por el propio Medina. "La decisión de presentar la querella fue única y exclusivamente mía y de mi familia, y en esa decisión el Partido Popular no ha tenido nada que ver, por lo que es tremendamente injusto que se vea perjudicado por vincularlo a esta decisión personal".
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Josu Alonso
En la actualidad cubre información política aunque, con anterioridad, ha pasado por todos los departamento...