FAPA, UGT y PSOE tachan la movilización de “ideológica, artificial y partidista”
Recuerdan que, con el último arreglo escolar (atendidas ya las alegaciones), se garantiza el derecho de educación de todo el alumnado
El Consell contesta por escrito todas las quejas que presentaron al president Puig los directores de colegios concertados
CADENA SER
Valencia
La federación de trabajadores de enseñanza de UGT no se sumará a la concentración en defensa de la escuela concertada de este domingo, que califican como una movilización ideológica, artificial y que no atiende a la realidad del sector.
Desde FETE entienden que las movilizaciones de la educación deberían reclamar soluciones a la situación del profesorado de la escuela concertada, como su recolocación en caso del cierre de unidades, y no a protestas que, según la federación sindical, no se ajustan a la realidad.
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Desde UGT, Francisco Javier González recuerda que el saldo global de las unidades concertadas en el arreglo global de este año es neutro y critica a las patronales de educación por no haber protestado por los recortes o las subidas de las ratios escolares de años atrás.
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González: 'Creemos que es una protesta artificial, que no responde a la realidad'
Tampoco apoya la concentración de mañana FAPA, la Federación de Asociaciones de Padres, que cree que el arreglo escolar de este año garantiza el derecho a la educación de todo el alumnado y exige, eso sí, la derogación de la LOMCE para mejorar la calidad educativa y evitar la supresión de unidades.
Puig critica el partidismo
El President de la Generalitat también se ha pronunciado sobre la concentración de la educación concertada. Asegura que se trata de una polémica infundada dado que el arreglo escolar se ha saldado en neutro, sin el cierre de unidades concertadas. De hecho, Ximo Puig insiste en que desde el Consell están abiertos al diálogo pero ha acusado de partidismo al PP y a los convocantes de la manifestación.
De hecho, Puig ha criticado al Delegado del Gobierno en la Comunitat, Juan Carlos Moragues, por apoyar esta concentración y no todas las manifestaciones que se convocaron en su momento para protestar contra los recortes y la subida de ratios. Además, el jefe del Consell asegura que la educación no debe ser un arma arrojadiza entre las opciones políticas ni un elemento que dinamite la convivencia.
Muestras de transparencia
Recordarán, por cierto, que hace un par de semanas varios directores de escuelas concertadas abordaron al president Ximo Puig a la entrada de Les Corts para mostrarle sus rechazo al arreglo escolar, que en un primer momento suponía el cierre de algunas aulas en este tipo de centros, una reducción mínima después del periodo de alegaciones.
Todos le entregaron por escrito al jefe del Consell esas quejas que, en otros tiempos, hubieran terminado durmiendo el sueño de los justos en cualquier cajón. Pero lo que hizo Puig es coger todas esas instancias y entregarlas en el registro de la conselleria de Educación que ahora ha respondido una a una todas esas preguntas de los directores de centros.
En las respuestas, la Generalitat explica los motivos por los que se ha procedido al cierre de algún aula y los criterios que se han seguido para aprobar el conocido como arreglo escolar. Un gesto, según fuentes de la administración autonómica, fruto de la política de transparencia adoptada por la Generalitat a pesar del uso y abuso de algunos sectores que se empeñan en politizar un asunto tan delicado como es la educación.
Críticas al delegado del Gobierno
Mientras, el portavoz del grupo socialista en Les Corts, Manolo Mata, ha criticado al PP por utilizar la educación con fines partidistas. Mata ha personificado sus críticas en el delegado del gobierno Juan Carlos Moragues y ha asegurado que le da vergüenza que ponga por delante a su partido antes de a la educación.
