Hacia El Rocío desde Granada entre poca arena y mucho barro
La hermandad de Granada llega mañana a El Rocío en una peregrinación alterada por las fuertes precipitaciones que están cayendo en todas las etapas
Granada
No es un camino fácil. Ni siquira se parece al de otros años. En pocas ocasiones los rocieros de Granada han podido bajarse de sus respectivas carretas para andar junto a la del Simpecado.
Desde el pasado domingo y hasta este miércoles ha llovido cada día y, a ratos, sin parar y con fuerza. Los caminos están difícilmente practicables y es posible que este jueves la hermandad no pueda cruzar, como es tradicional, la vía pecuaria conocida como Raya Real, ya en pleno Parque Nacional de Donaña.
Este miércoles, la Hermandad de Nuestra Señora del Rocío de Granada tenía previsto cruzar el Vado del Quema al mediodía. Pero el río Guadiamar venía tan crecido que el pasado ha tenido que hacerse por el puente.
En cualquier caso, el camino se hace con tranquilidad y disfrute, con rezos y fiesta, como es hatibual, como traslada el enviado especial de Radio Granada al camino granadino Eduardo Salamanca.
El camino a El Rocío de la Hermandad de Granada, pasado por agua
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