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MICROMENTARIO

¡Apaga y vámonos! con Romualdo López

Si lo que prima en vuestros intereses es el evento social, adelante con ello. Pero no lo llaméis música, por favor, no os llaméis música

Nick Cave / EFE

Murcia

La hija de nadie.

Apaga y vámonos / La hija de nadie

07:01

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Nick Cave es un cantante, escritor, instrumentista, compositor y alma oscura e inquieta que nació en Australia a finales de los años 50. Me suelo acordar de él con frecuencia, no exactamente de la persona, porque obviamente no lo conozco, sino más bien del personaje, de su actitud bien vestida. «¿Qué haría en esta situación Nick Cave?¿Qué pensaría de esto otro?».

Para los que somos de excavar en las profundidades del amplio espectro musical que nos atrae, las canciones y sus autores representan una importancia capital. Las manifestaciones culturales sirven para dotar de riqueza de contenido a nuestras vidas, los que elegimos la música debemos de estar siempre alerta con eso. Sin excesiva solemnidad, ya que hablamos de música popular al fin y al cabo, pero sin bajar la guardia ante la mediocridad y la nadería. Esto, que parece de perogrullo, se hace especialmente importante en estos tiempos de advenedizos, discusiones vácuas sobre términos y etiquetas, gente sin talento que siempre ha existido en torno al negocio musical pero que ahora parecen importar más que los artistas. En definitiva, todo un establo lleno de paja de diseño alimentada por las redes sociales. De diseño feo, a veces, por cierto. Tenemos que defender lo nuestro, y lo nuestro es la música en el mayor grado de pureza que podamos conseguir. Busquemos la actitud, indaguemos en la verdad de cada artista que admiramos y encontremos dicha verdad en las canciones, con todas sus consecuencias.

Nick Cave nos suele contar muchas cosas en sus canciones. De ahí que lo tome como ejemplo. No os tiene por qué gustar, aunque hay algunas composiciones suyas casi perfectas. Pero claro, su discografía es muy amplia y es complicado ponerse de primeras a indagar en la misma en estos tiempos de urgencias tan perjudiciales para el disfrute reposado del arte. Realmente me he acordado de él porque lo menciona otro músico, español de Malasaña, en una entrevista que acabo de leer. Cito literalmente: «Durante años puede estar Nick Cave oculto hasta que se convierte en un evento social, que es lo que está en boca de todo el mundo y por eso hay que ir a verle. Tú ya no tienes identificación con la carrera de un artista porque realmente hay que seguirlo a ver lo que hace. Te lo puedes saltar diez años, o quince, hasta que se vuelve a convertir en evento social. Y lo notas porque de pronto vas al garito a verle y están todos los que tienen que estar. Cuando están todos los que tienen que estar no es música, es evento social, y en eso básicamente se ha convertido todo esto». El músico al que cito es Fernando Pardo, conocido por recorrerse miles de kilómetros con Sex Museum, Los Coronas o Corizonas. Tiene más razón que un santo.

Nick Cave

Nick Cave / EFE

Precisamente Corizonas actúan este fin de semana en el festival SOS 4.8, a celebrar en Murcia. Es un buen ejemplo de cómo unos músicos curtidos en mil batallas se juntan para crear un proyecto más aseado de lo que acostumbran a hacer, para acceder a más público y así poder ganarse la vida mejor en este enjambre de festivales y música de consumo rápido. Se trata de una fórmula que les funciona bien, sin perder demasiada dignidad por el camino.

La discusión sobre el SOS 4.8 es una de las más cansinas de los últimos años en nuestra región. Hasta el punto de que es inútil participar de la misma. Yo hace tiempo que ni lo intento, porque siento que mi opinión se difumina en el cruce ansioso de razones para alimentar los egos. De ahí que intente extraer una moraleja en este artículo que sirva para cualquiera de los festivales clones de nuestro país, llenos de despropósitos en lo estrictamente musical, pero también con sorpresas agradables que descubrir.

Intentad ser honestos con vosotros mismos al hablar de música, para algunos de nosotros es algo muy importante. Si lo que prima en vuestros intereses es el evento social, adelante con ello. Pero no lo llaméis música, por favor, no os llaméis música.

Por cierto, ¿qué pensaría Nick Cave de todo esto? Quizá que la música es la hija de nadie, como dice en esta canción...

Paco Sánchez García

Paco Sánchez García

Redactor de Radio Murcia y director de Hoy por hoy Murcia.

 
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