Maniobras de la OTAN en San Gregorio

Dentro de la báse militar de San Gregorio (Zaragoza) existen varios poblados de prácticas como el de "Casas Altas". Aquí se ha llevado a cabo el ejercicio de la Fuerza Conjunta de Muy Alta Disponibilidad de la OTAN. Los militares que lo han realizado tení

Los soldados se han encontrado el primer problema en la calle principal. Una alambrada impedía el paso de los carros de combate

Los militares se han visto obligados a cortarla utilizando unas tenazas y camuflándose con humo verde

El momento de máximo riesgo se produce al quitar la alambrada para despejar el camino. Por ese motivo, al mismo tiempo que un soldado arrastra el alambre de espino, sus compañeros le cubren desde atrás

Una vez despejado el camino, los distintos batallones se cubren dentro de las casas. Todos los combatientes utilizan armas reales con munición de fogueo

Como dato curioso, los soldados enemigos -situados al otro lado del poblado- están especializados en llevar a cabo ese papel. Los militares que actúan como enemigo de la OTAN siempre son los mismos

Los batallones de la Fuerza Conjunta de Muy Alta Disponibilidad van poco a poco ganando terreno. Los soldados tienen que ser ágiles y rápidos, sobre todo al moverse de un edificio a otro, de lo contrario, les disparan y no pueden continuar

Cada militar lleva en su casco y chaleco unos dispositivos infrarrojos. Si el enemigo les alcanza, lo saben gracias a esta tecnología que, además, les impide seguir disparando

El humo verde es esencial a la hora de tomar el poblado. Lo utilizan para camuflarse y, poco a poco, ganar terreno al enemigo

Los soldados tienen la obligación de cubrir a sus compañeros cuando estos salen corriendo hacia otro habitáculo

El enemigo, al estar situado en el poblado, suele tener armas anti-tanque como este cañón C90

En este escenario, el enemigo, ya acorralado en una sola casa, se defiende con esa metralleta

Al fondo se aprecia como un soldado de la OTAN se despista y el enemigo aprovecha para dispararle desde su posición

Las muertes, pese a no ser reales, se simulan para que todo se parezca lo máximo posible a un verdadero campo de batalla

Finalmente el batallón de la OTAN acorrala a la última terrorista antes de terminar el ejercicio con éxito