El asesinato de José Couso, trece años ya
A Coruña
Ya han pasado trece años. Desde que un tanque del ejército americano en plena Guerra de Irak varió su trayectoria, giró y disparó contra el Hotel Palestina, donde se alojaban los periodistas que cubrían ese conflicto absurdo e injusto a la caza del petróleo. El cámara ferrolano José Couso falleció a consecuencia de los disparos haciendo su trabajo, en una terraza iluminada en medio de la noche. Blanco fácil si olvidamos que tenía inmunidad, la inmunidad a la que tiene derecho un periodista en el ejercicio de su trabajo. Se convirtió en un símbolo, un símbolo del miedo que tiene el poder a los que buscan ese intangible que es la verdad, el hecho cierto, el reflejo de lo que pasa. Un símbolo de la servidumbre ante el poder de Estados Unidos por parte de buena parte de nuestros gobernantes, sin apoyos de gobiernos como el de Aznar en la búsqueda de responsables. Un símbolo de todo lo que tenemos y podemos perder si no estamos alerta, si no luchamos, si nos dejamos ir. La dignidad de su familia, la dignidad de su trabajo hace que no debamos olvidar. El ayuntamiento dará su nombre a una calle en esta ciudad. En Ferrol y otros puntos de Galicia y España se han sucedido los actos de recuerdo. Ejercicios de dignidad.
José Couso, reporteros de guerra.