Pequeños penitentes
Alumnos del "Divino Maestro" celebran la procesión infantil
Palencia
Desde las 12 horas, más de 150 alumnos del colegio han cambiado el uniforme escolar por el traje de cofrade. Han salido a la calle con sus túnicas azules, sus capirotes y cíngulos naranjas. Los pequeños penitentes, llevan medallas con el escudo del colegio protagonizando la 'primera' procesión de la Semana Santa palentina.
Se trata de una actividad que vienen desarrollando desde hace tres años, en la que participa toda la comunidad educativa.
En la procesión desfilan alumnos de Educación Infantil y Primaria, arropados por jóvenes de ESO, que durante varios meses colaboran en la preparación del acto.
El cartel anunciador de la procesión es una imagen del cuadro que el pintor palentino Antonio Capel regaló al centro y que representa a un Crucificado sobre un árbol con 'las flores de la vida' y un niño que lo mira.
"En septiembre empezamos a preparar nuestra procesión de Semana Santa, hemos tenido varios encuentros con la Hermandad de Cofradías de Palencia, para programar y poner en marcha este proyecto. Un grupo de profesores y padres han trabajando en la realización de los trajes de los niños. Por las tardes, en la biblioteca del colegio, alguna madre, abuela o padre hemos colaborado la actividad. Este año se ha incorporado un apartado en el que se ha hablado de la gastronomía típica de estas fechas en Castilla y León", explica la directora del Colegio Divino Maestro Carlota Prieto.
Los hermanos acompañarán a cuatro imágenes por las calles del centro de la ciudad. Dos de ellas son obra de un alumno del colegio, Alberto Paredes, autor de la Virgen de los Dolores y de un Cristo con una cruz a hombros, imagen a cuya túnica se han añadido varias filigranas en oro.
Otro de los pasos es un Crucificado, imagen que ha sido cedido un año más por una familia del centro y el cuarto es una Cruz con una sábana que representa a Jesús Resucitado y que ha sido bordada por un familiar de una docente del colegio.
El recorrido de la procesión arrancó en la capilla del Santo Sepulcro, en la calle Valentín Calderón. Continuando por la Calle Mayor, Don Sancho, Joaquín Costa, plazuela de la Sal, Plaza Mayor, plaza San Francisco, Ignacio Martínez de Azcoitia y Lope de Vega, para terminar en el punto de inicio, donde se reza una oración.