Pendientes de un acuerdo
Los sindicatos y la dirección de la empresa afrontan una fase decisiva de las negociaciones en torno al plan industrial
Una trabajadora de la factoría de Motores que Renault tiene en Valladolid / Eduardo Margareto (ICAL)
Valladolid
Las negociaciones en Renault prosiguen este martes con varias posturas bastante claras, hasta el momento. Por un momento está la empresa, que insiste en buscar más flexibilidad y que, para ello, ha puesto sobre la mesa un turno de fin de semana y festivos, con jornadas de doce horas y un sueldo mensual de 1.350 euros brutos.
Unas condiciones que son "aceptables" para la plataforma integrada por UGT, Comisiones Obreras y la Confederación de Cuadro, mayoritarios en el Comité Intercentros. "Aceptables", pero no "ideales" según ellos mismos han manifestado. Queda por ver cuánto pueden acercarse las posiciones en este sentido.
Por otro lado, CGT y Trabajadores Unidos insisten en que Renault aprovecha la presentación de un plan industrial para alterar condiciones esenciales del convenio colectivo y recuerda que no es la primera vez que algo así sucede.
Recriminan también a la Junta de Castilla y León que, antes incluso de comenzar la negociación, ya hay comprometido respaldo económico, para lo que ha instado a las partes a buscar un acuerdo satisfactorio para todos.
Y ya que estamos en la arena política, CGT ha reclamado a Podemos e Izquierda Unida que, mediante su representación en las Cortes de Castilla y León, reclamen a Renault que reduzca las tasas de empleo temporal que tiene en su factorías.
Mario Alejandre
Cuenta lo que pasa en Valladolid y en Castilla y León desde que se incorporó a la SER, en el verano...
