¡Y casi empata!
El conjunto armero completo los peores 80 minutos de la temporada, completamente dominado hasta ponerse 3-0; pero en un arreón de orgullo en los últimos diez logra dos goles y roza la heroica
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Salvador Sas (EFE) / Salvador Sas (EFE)
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Eibar
La Sociedad Deportiva Eibar jugó en Balaídos los peores 80 minutos de toda la temporada, y claro, si se da tanta ventaja a un rival como el Celta, que te domina completamente a través de la posesión de balón, se corre el riesgo de ponerse perdiendo 3-0, como así sucedió. Y pudo ser peor. Eso sí, no se puede eludir, antes que todo eso, con 0-0 en el marcador, el árbitro se comió un penalti clarisimo de Cabral a Borja Baston que hubiera supuesto la expulsión del central celtiña.
Aún así, a pesar de haber jugado un partido horrible, el Eibar... ¡casi le empata al Celta en su campo! Y todo gracias a su orgullo. Lástima que esa reacción de orgullo llegara demasiado tarde. Un poco antes y el equipo armero empata en Balaídos casi con toda seguridad. Porque en los últimos diez minutos, el Eibar se quitó la presión de encima del Celta de un plumazo, se quitó sus dudas y sus medios, Mendilibar movió el banquillo, y reaccionó para marcar dos goles, uno de penalti obra de Saúl Berjón, y otro del japonés Takashi Inui en una buena acción individual. Y tuvo más ocasiones claras para haber logrado ese empate que hubiera sido increíble, pero no hubo más suerte, y se quedó sin tiempo para hacer más.
Demasiado fue después del mal partido que hizo en líneas generales todo el Eibar. Porque salvo el comienzo y el final, el resto del partido estuvo siempre a merced de un Celta que le superó con claridad en el centro de campo, que llevó el peso del partido, que monopolizó la posesión de la pelota, y que no paró de crear ocasiones de gol. y tanto fue el cántaro a la fuente que al final se rompió. Guidetti por dos veces y Jonny perforaron la portería de Asier Riesgo, y sino llega a ser por la buena actuación del portero debarra la sangría habría sido mayor, y ni siquiera se hubiera podido hablar de una posible reacción al final. Partido para olvidar, sí; pero como siempre, el Eibar nunca se rindió y resactó, por lo menos, unas sensaciones positivas con sus últimos diez minutos. Algo es algo.
- FICHA TÉCNICA:
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Roberto Ramajo
Entro en el grupo en 2002 como redactor de prácticas. En 2005 se incorporó a la redacción en Gipuzkoa...