Zamora niega que la voz de las grabaciones del sumario sea la suya

Santa Cruz de Tenerife

El macro juicio por el 'caso Arona' ha continuado en su sexta sesión, con la comparecencia del empresario Arsenio Zamora Toledo, acusado de un delito de cohecho por presuntamente actuar como intermediario para el cobro de comisiones ilegales y extorsionar al constructor, José Ramón Ansorena. En este sentido, Zamora ha reconocido que preguntó en el Ayuntamiento de Arona por los trámites necesarios para desbloquear una licencia de obra mayor para la construcción de un edificio de 206 apartamentos en Costa del Silencio pero que en ningún caso pidió dinero por ello. Preguntado por la fiscal, Francisca Sánchez, por su aparición en una grabación que se ha presentado como prueba y cuyo contenido fue desvelado esta semana en la Cadena SER, Arsenio Zamora ha negado que la voz que aparece en la cinta sea la suya; Agregó que nunca mantuvo reuniones con el constructor, y tampoco le exigió el pago de 45 millones de pesetas para poder obtener la licencia de obra mayor. "Conocía al padre del señor Ansorena pero nunca me reuní ni comí con él y jamás me dediqué a realizar favores para el Ayuntamiento", declaró Zamora. Del mismo modo, el empresario reconoció que solía acudir periódicamente al consistorio por temas personales debido a que tenía problemas con la junta de compensación y unos terrenos de su propiedad.

Trama de comisiones y sobornos

El Ministerio Fiscal sostiene que Arsenio Zamora Toledo es sólo un eslabón más de una trama de cobros de comisión y sobornos en los que estarían involucrados el aparejador municipal, Roberto de Luis; el arquitecto, Eliseo de la Rosa y el ex edil de Urbanismo, Félix Sierra. Todos ellos, según la fiscal, cobraban comisiones por la concesión de las licencias de obras. El ministerio fiscal pide para Arsenio Zamora Toledo una pena de tres años de prisión. Las sesiones del juicio se retomarán el próximo lunes.