Las caras nuevas de Sestao River y Arenas, protagonistas

Bilbao

Dani López, fornido delantero centro de 30 años llegado desde Escocia al Arenas y el joven y eléctrico lateral derecho cedido del Bilbao Athletic al River se pasaron por Radio Bilbao para pulsar sus estrenos en sus nuevos destinos. “De momento muy bien con Bolo y los jugadores, acoplándome, buscando piso (en Castro), nunca había venido al Norte”, comenta el 9 de Hortaleza, mientras que el 2 de Galdakao, que suma dos victorias en dos partidos con los verdinegros, añade que Iraola es su ejemplo, aunque “soy más parecido a De Marcos”.

Dani López desvela que el clima no será un hándicap en su escala en Getxo: “Estoy aclimatado a la lluvia, no hay problema”, bien acompañado por Ibon Díez y Luisma Villa, con los que ya ha compartido caseta. El transfer del Inverness se resiste, aunque espera poder ser alineado este fin de semana ante el Leioa. Del barrio de Hortaleza, con un amplio currículum a sus espaldas entre filiales del Atlético, Getafe y Espanyol pasando por La Roda y con aventuras en Inglaterra y Escocia, no dudó venir al Arenas: “Cuando me salió la prueba allí me la jugué pese a que tenía equipos pendientes. Ya no estaba teniendo las oportunidades que yo quería y tomé la determinación de rescindir contrato con ellos y volver a España”. Se adapta bien al puesto de 9 o de mediapunta: “Técnicamente no estoy mal y le pego con las dos piernas”. Reconoce que le ha “sorprendido” la calidad media de la plantilla del Arenas y que Gobela es “mejorable”. Un sexto puesto inesperado para el equipo de Bolo que invita “a soñar”. “Nunca se sabe lo que puede pasar, una vez que te ves cerca de esos puestos a ver si podemos dar un pelotazo…, pero no nos tenemos que obsesionar”, señala Dani López.

Por su parte, Aguirrezabala también se encuentra “muy a gusto” y aclimatándose a Las Llanas y al vestuario del River, donde ya ha jugado dos partidos como titular ante Portu y Leioa, con dos victorias. “He tenido esa suerte, hemos aportado todos. Los compañeros me han acogido muy bien”. Una latosa lesión de espalda le ha laminado en el filial de Ziganda: “Me da pena, ya que todos los futbolistas desean estar en Segunda o en Primera, pero lo que quiero es jugar y la cesión es lo mejor”, subraya. La idea, no lo oculta, versa en “volver” y “después ya se verá”. Se fija en Iraola, “de la casa y muy buen lateral”, aunque sus características difieren del de Usurbil: “Soy más rápido, con más recorrido”. Formó en Lezama una banda derecha letal con Jurgi Oteo, ambos cosecha del 95: “Sí, hicimos buenos años”, apunta orgulloso.