Puigdemont pedirá una reunión al próximo presidente del Gobierno
La portavoz Neus Munté explica que el nuevo President no pedirá audiencia al rey y dice que son “muy críticos con la negativa del monarca" a recibir a Carme Forcadell
Andreu Dalmau (EFE)
Barcelona
El presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, piensa llamar al próximo presidente del Gobierno, una vez sea investido, para "felicitarle" y "pedirle una reunión". Así lo ha explicado la consejera de la Presidencia y portavoz del Gobierno, Neus Munté, que ha reprochado a Rajoy que no se haya puesto en contacto con Puigdemont después de su investidura.
Por el contrario, una vez que el nuevo presidente del Gobierno consiga ser investido, sí habrá "corrección y normalidad institucional" por parte de Puigdemont, ha asegurado. Sobre la posibilidad de que Rajoy repita en el cargo, ha calificado de "nefasta experiencia" la actual etapa de Gobierno del PP: "Es bastante evidente que no deseamos ningún tipo de continuidad ni en las personas, ni en las formas, ni en las acciones”.
Según Munté, "lo preferible es que haya un Gobierno que escuche las demandas" de la ciudadanía, que "no sea inmovilista" y que "respete la democracia".
La consejera por otra parte, ha descartado que Puigdemont pida audiencia al Rey o contacte con él para comunicarle su nombramiento, tras la "negativa" de la Casa Real a la presidenta del Parlamento, Carme Forcadell. Munté ha reprochado a Felipe VI que no se pusiera en contacto con Puigdemont la semana pasada después de ser investido: "El rey tuvo ocasión de saber del nombramiento de primera mano por parte de la presidenta del Parlament. Esto no se produjo y ahora estamos ya en otro momento”.
"Somos muy críticos con la negativa del monarca", ha dicho en referencia a que la Casa del Rey pidió al Parlamento recibir por escrito la comunicación oficial sobre la investidura --trámite necesario para cumplir el Estatuto, que estipula que el rey nombra al presidente -.
Aún así, Munté ha defendido que es "tan legítimo no ir, como ir para hacerle llegar las demandas, explicarle la situación en Cataluña y el mandato mayoritario del Parlamento".
"Es tan correcta algo como otra, porque el objetivo final es compartido: Exigir respeto a las instituciones catalanas", ha añadido la consejera.
