Sociedad
RENOVACIÓN ENERGÉTICA

Pilar Álvarez se reunió con los promotores de la planta de biomasa en diciembre

La concejala de Sostenibilidad, del partido EQUO, cree es el momento de que "se utilice de una vez el principio de precaución".

Las Palmas de Gran Canaria

Mientras la Consejería de Medio Ambiente concluye el informe de impacto ambiental, en el que está incluído el informe de Sanidad Ambiental adelantado ayer por Ser Las Palmas, responsables del consistorio capitalino se reunieron con los promotores de la planta de biomasa proyectada en el puerto de la Luz y la Esfinge para conocer de cerca los detalles de un proyecto que genera dudas en el consistorio de la capital de Gran Canaria.

Pilar Álvarez, concejala de Sostenibilidad, fue la responsable que se sentó con los promotores del proyecto. En su opinión es el momento de que "se utilice de una vez el principio de precaución". ENCE, empresa que está detrás de la planta de biomasa, está especializada en la fabricación de papel a partir de plantaciones de eucalipto y la planta se construiría en una parcela que se encuentra en el Plan Especial de Ordenación de la Zona de Servicios del Puerto de la Luz.

Según los datos aportados en la cita y adjuntados en un extenso informe al Gobierno de Canarias en un dossier, la caldera quemaría biomasa de origen forestal y los árboles procederían en su mayoría de Brasil, aunque también de Estados Unidos y de la República Democrática del Congo. Se contaría también para la combustión con restos forestales, agrícolas y jardinería recogidos en Canarias, alcanzando, según la información aportada entre un 10 y un 15%.

El suministro que necesitaría la planta, que tendría una longitud de 65 metros de altura, sería de 400.000 toneladas de madera al año. Uno de los aspectos a definir es si este tipo de plantas y la biomasa se considera generación de energías renovables o no.

El Gobierno de Canarias, dentro de su Estrategia de Especialización Inteligente de Canarias elaborado para el próximo lustro sí la vincula al crecimiento verde y sostenible, definiéndola como baja en carbono, favorecedora del desarrollo industrial y en clave de eficiencia energética. Otras voces, como la citada Álvarez, la del presidente del Cabildo, Antonio Morales, o la de Ecologistas en Acción cuestionan que esto sea así. Además de la contaminación referida en el informe de la Consejería de Sanidad, también está la traza contaminante que deja la importación de madera y la dependencia del exterior que supondría.

 
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