Areso y la transformación de Bilbao comparten lienzo

Es el cuadro número 23 de la Sala de los Alcaldes. Es ligeramente más grande que el resto, algo que abruma a su protagonista, "es demasiado grande, me hubiera conformado con una cosa bastante más pequeña", ha reconocido Ibon Areso entre risas, para añadir su admiración hacia el pintor Jesus Mari Lazkano, que él mismo elegió para encargarle el lienzo.

Lazkano es uno de los máximos exponentes de la pintura realista del País Vasco. No es un retrato al uso. Su particularidad radica en que Areso -con la makila en la mano- comparte protagonismo con la villa de Bilbao, vista desde Artxanda. "La persona no es lo que aparenta, es lo que hace, y en este caso, Bilbao y Areso están plenamente unidos", ha explicado. Con un detalle casi fotográfico se ve la ría, el Guggenheim, Abandoibarra o la torre Iberdrola.

Por su parte, el actual primer edil, Juan Mari Aburto, ha subrayado que Areso ocupa su lugar en la historia de la villa con un cuadro que, a la vez, refleja la evolución de la misma. "Es un reconocimiento y admiración como autor de la gran transformación urbana de Bilbao", algo que ha querido matizar Areso, "alcalde has exagerado, eso fue una labor coral", ha respondido.

Una presentación que ha estado precedida por la polémica ya que el gabinete de Aburto intentó descubrirlo durante la campaña y, tras denunciarlo EH Bildu, la Junta Electoral obligó a suspender el acto. Ha acudido la corporación municipal al completo y también quien fue alcalde de Bilbao, Josu Ortuondo.