Denuncian trabas a niños extranjeros para jugar al fútbol
Al menos dos clubes de fútbol de Barcelona ya han decidido no tramitar licencias de niños extranjeros por los obstáculos e impedimentos reglamentarios que pone la Federación Catalana por miedo a una sanción de la FIFA
Ayuntamiento de Roquetas de Mar
Barcelona
Esto es lo que han denunciado varios clubes, en una protesta encabezada por el presidente de la Peña Barcelonista Barcino, Tomás Desembre, que ha encontrado el apoyo de partidos políticos como ERC.
Destacan que, por sistema, la Federación Catalana suspende las licencias que aparecen con algún nombre extranjero: "hay clubes que han decidido no tramitar licencias de chicos extranjeros por los problemas que conllevan"
Puede ser impugnado el propio nombre o el lugar de nacimiento, y esto afecta a niños españoles y extranjeros. Está afectando por ejemplo muchos niños adoptados, pero con nombres extranjeros, que son ciudadanos españoles de pleno derecho. "Nos encontramos con muchos casos de niños adoptados que o no pueden jugar o les piden la documentación como si fueran extranjeros", según denuncian los clubes.
Si son españoles la Federación Catalana no se conforma con el libro de familia y les pide de entrada el DNI o pasaporte aunque no tengan la edad mínima requerida. Estos casos suelen terminar con una licencia provisional una vez se discuten en la Federación.
Si son extranjeros la Federación reclama hasta 23 documentos que se convierten en una montaña: entre ellos, deben acreditar la solvencia económica de los padres y sus contratos de trabajo, por lo que muchos terminan desistiendo.
Se da la circunstancia de que según la Federación Catalana ya sólo quedan unas decenas de expedientes por regularizar pero Tomás Desembre aclara que son los casos que los clubes han denunciado y que hay cientos que han quedado escondidos porqués los padres o los clubes han desistido.
Los clubes que denuncian la normativa (Unión Deportiva Parc, Club Sant Jordi, UE Celta, Atlético Poblenou, APA Poble Sec-Satalia, Singuerlín y Peña Barcino) destacan una reciente sentencia judicial en Euskadi que obliga a la Federación vasca a admitir las licencias si los niños pueden acreditar sólo su residencia. Es precisamente lo que querrían que pasara también en el caso de los niños catalanes.
