Las burbujas de los espumosos de Castilla La Mancha, conquistan, cada vez más, las mesas en Navidad

Ciudad Real

En las vísperas de Navidad, las cooperativas de la región duplican sus ventas de vinos dentro y fuera de España y entre ellos los espumosos siguen ganando terreno, frente a los prestigiosos cavas catalanes o el champagne francés. Sólo en la Denonimación de Origen La Mancha, la zona vitivinícola más extensa de Europa, se estima que comercializarán más de un millón de botellas, de espumosos esta campaña.

En palabras del presidente de la Denominación, Gregorio Martín Zarco, los espumosos son los mimados de las bodegas. Partiendo de variedades como chardonet o airén, están surgiendo espumosos de una calidad excelente, con una cuidada y exquisita presentación en botella. Martín Zarco reitera que en relación precio- calidad, están siendo muy bien valorados por los consumidores, tanto en el mercado interior como en Europa.

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También en mercados asiáticos como China, están causando furor. En la Cooperativa El Progreso de Villarrubia de los Ojos prevén comercializar de 30 a 50 mil botellas. Los expertos ponen en valor la calidad de las viñas, que en esta zona, con más de 50 años de antigüedad, están dando un buen fruto a través del método tradicional, por 2ª fermentación en botella y utilizando las mejores técnicas enológicas.

Espumosos que una vez servidos para degustar se les reconoce por su burbuja fina y constante, aroma de albaricoque y en el paladar, una acidez constante, como explica Pedro Fernández enólogo de El Progreso.

Bodegas como Vinícola de Castilla en Manzanares, fueron de las primeras en la región, en apostar por los espumosos, desde hace 27 años, llegando a formar parte del Consejo Regulador del Penedés.

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