Anoeta decidirá

La Real Sociedad deberá remontar en Anoeta si quiere seguir en la Copa del Rey. Y todo tras perder en casa de la UD Las Palmas, que remontó la tempranera ventaja del equipo donostiarra, en un partido en el que casi todo ocurrió en el primer periodo, con dos goles, un penalti fallado por equipo, lesión de Bigas y gran actuación de Valerón liderando a los grancanarios.

Los donostiarras entraron mejor a un choque copero plagado de suplentes y desde el comienzo Bruma empezó a hacer daño por la izquierda. Por esa zona llegó el gol visitante, en un grave error del canterano Nili. Garrido tapó el primer disparo de Oyarzábal, pero el balón quedó para Bruma, que lo colocó en la escuadra. El empate llegó, paradójicamente, tras un córner a favor de la Real que dio origen a un rápido contraataque. La defensa guipuzcoana no logró despejar el balón y cuando Diego Reyes iba a hacerlo, se encontró con la pierna de Asdrúbal. El penalti lo ejecutó el propio delantero, lo rechazó Olazábal, pero la pelota quedó en el área chica, donde el propio Asdrúbal lo envió a la red.

La casi inmediata desgracia del central Bigas, lesionado en la rodilla izquierda, frenó la reacción de la Unión Deportiva, que pudo irse al descanso en desventaja, cuando el árbitro interpretó como derribo dentro del área un bloqueo de Garrido a Chory Castro para defender un balón que ya tenía atrapado el portero. Sin embargo, Raúl Lizoain emuló a Olazábal y rechazó el disparo raso de Rubén Pardo, sin conceder posibilidad de segundo remate. Incluso quedó tiempo para que Willian José, de cabeza, estuviera a punto de adelantar a Las Palmas en el marcador.

La Unión Deportiva también fue superior cuando tuvo ventaja en el marcador, con Valerón participando en casi todas las acciones de ataque, pero no la plasmó con más goles. Olazábal lo evitó en varias ocasiones, la más clara en un duro disparo de Willian José. La Real Sociedad mostró una leve mejoría con los cambios porque creó peligro pero demasiado tarde, a balón parado casi siempre, y lo mejor que se lleva a San Sebastián es un valioso gol de visitante que deja abierta la eliminatoria.